El sistro o sistrum (sonajero) era un instrumento musical de percusión usado por primera vez por los egipcios, de uso común en las prácticas musicales de la antigua Grecia y que con frecuencia se representaba en las artes visuales, tales como la escultura y la cerámica. Construido de arcilla, madera o metal, el instrumento proporcionaba acompañamiento rítmico a otros instrumentos, especialmente en los festivales y ritos religiosos. Al agitar el instrumento como un sonajero, el sonido se produce por los objetos móviles de las varillas horizontales o el movimiento libre de estas contra el marco.
El instrumento, originario de Egipto y visto por primera vez en el Reino Antiguo, estaba estrechamente asociado con los ritos en honor a Isis. De hecho, en el arte egipcio la diosa y sus sacerdotisas suelen estar representadas sosteniendo un sistro. En Egipto el instrumento tenía dos formas: un aro ovalado o en forma de templo. En la cultura griega el sistro tenía forma de aro alargado y se usaba en procesiones, sacrificios, festivales y en contextos funerarios. Los ejemplos más antiguos, de la Creta minoica, datan de c. 2000-1900 a.C. y están hechos de arcilla con dos varillas horizontales de madera fijas y tres discos móviles de arcilla para crear sonido al golpear los lados del marco en forma de aro. Sin embargo, es posible que las versiones en arcilla no estuviesen destinadas a ser tocadas (el sonido que producen es bajo), sino que representaran el instrumento en contextos funerarios. De hecho, se han encontrado muchos sistros e instrumentos musicales similares en tumbas, lo que indica que la música formaba parte de la vida de ultratumba. Las versiones de sistros en arcilla también pueden haberse usado como juguetes infantiles.
Se conservan ejemplos de sistros de bronce, en su mayoría en contextos funerarios. Un ejemplo interesante data de la segunda mitad del siglo II a.C. y se encontró en Ática. Este sistro tiene cuatro varillas horizontales de bronce de longitud decreciente, que deslizan hacia dentro y hacia afuera del aro. En la parte superior del aro hay un perro modelado, en la base del mango hay una cabeza de toro modelada y el propio mango está tallado para representar un grupo de seis auloi con el fin de asemejarse a una columna rematada por un capitel labrado que une el mango con el aro.
En el arte griego, los bailarines de las procesiones suelen estar representados sosteniendo un sistro. Un ejemplo célebre es el Vaso del Cosechador de Hagia Tríada, en la Creta minoica (1500-1450 a. C.), que representa a un intérprete de sistro en una procesión del festival de cosecha.