Odin (Nórdico Antiguo: Óðinn) es el principal dios de la mitología Nórdica, aunque también se encuentra presente como Woden (en Ingles Anglosajón), Wodan (en Francés Antiguo), y Wutan o Wuotan (en Alto Alemán Antiguo). Descrito como un anciano de un ojo increiblemente sabio, Odin es por lejos quien más variadas caracteristicas posee entre los dioses y no sólo es el hombre a quien llamar cuando la guerra se estaba preparando sino que también es el dios de la poesía, de los muertos, las runas y la magia. Siendo parte de la familia Æsir de los dioses, ayudó a crear el mundo, residiendo en Asgard (la fortaleza y hogar de los dioses), reuniendo guerreros caídos en batalla en el Valhalla ("el salón de los caídos"), y eventualmente triturado a muerte por el lobo Fenrir en el Ragnarok "el destino final de los dioses" en el cual el mundo es destruido.
Funciones
Odin un antiguo personaje originario de la mitología Nórdica, aunque como Jens Peter Schjødt nos señala, muchos academicos piensan que su alta posición en la jerarquía de los dioses podría haber sido añadida mucho más tarde (219). El rol de Odin como "Padre de todo" o padre de los dioses es un tema literario abordado en fuentes posteriores -aparentemente influenciados por nombres Cristianos a Dios- que a una real reflexión de su estatus en las sociedades de la Era Vikinga. La poesía skaldic (Era Vikinga, poesía pre-Cristiana mayoritariamente oídas en cortes de reyes y sus séquitos), por ejemplo, nombres como Balder, Thor, y Vali como hijos de Odin, mientras que mucho después en el Siglo XIII el autor Islandés Snorri Sturluson también incluye a Heimdall, Týr, Bragi, Vidarr, y Hodr a la lista. Y aunque Odin se encontraba casado a Frigg, muchos de estos hijos provienen de diferentes madres, Odin aparece como un mujeriego en muchos de sus relatos e incluso presumiendo de estos amorios, recordandonos de (y quizás inspirado por) Zeus de la mitología Griega.
Más tangible es el rol de Odin como dios de guerra. A pesar de su apariencia desgarbada nunca fue representado como un guerrero (esa era más bien la tarea de Thor) pero era llamado a la guerra cuando esta estaba siendo preparada para dar consejo y regalos especiales. En fuentes germánicas del sur y al oeste, era Odin quién decidia cuales batallas o guerreros serían victoriosos o cuales terminarían de maneras desafortunadas. Odin contaba con las Valkirias -guerreras supernaturales- quienes transportaban los cuerpos de los luchadores quienes habían sido liquidados en batalla a su especial paraíso el Valhalla; estos luchadores eran conocidos como los Einherjar y se convirtieron en la primera línea de combate contra las fuerzas invasoras del Inframundo durante el Ragnarok. Es por este aspecto que guerreros individualmente se sentían atraídos hacia el culto de Odin, siendo éstos uno de los grupos mayoritarios dentro de un culto principalmente constituido de la elite: reyes, jefes y poetas.
El [Odin] es descrito cayendo en trances, tales como dejar su cuerpo atrás y viajar a través de su forma espiritual o la de un animal, y en variadas ocasiones teniendo visiones de sabiduria provocada por variados tipos de terribles experiencias. (246)
Este tipo de adivinación calza muy bien con el rol de Odin como consejero y podría haber sido de mucho interés en los gobernantes de la Era Vikinga. La naturaleza de la magia de Odin, por otra parte, muchas veces lo hace ver como un chamán, un aspecto que es reforzado por su función de dios sanador.
Atributos
Odin puede ser reconocido por su sombrero y capa, su larga barba, y su único ojo (recordándonos un tanto a Gandalf del El Señor de los Anillos de Tolkien en este último aspecto). Su lanza Gungnir es uno de sus principales atributos y pareciera haber estado presente dentro de las creencias de la Era Vikinga, como ha sido insinuado por las pequeñas cabezas de lanzas en miniatura encontradas por todo el sur y centro de Suecia.
Otros atributos son el anillo Draupnir, el cual gotea para cambiar de forma a nuevos anillos cada nueve noches, y el caballo Sleipnir, el cual ha sido mencionado a principios de la literatura Nórdica Antigua, poseyendo un total de ocho patas. Así mismo, los dos cuervos de Odin Huginn ("pensamiento") y Muninn ("sabiduria") siendo estos elementos míticos muy antiguos y bien establecidos, probados por su aparición en sus ornamentos y runas encontradas en rocas antes de los años 800. Estos vuelan alrededor del mundo acumulando noticias, y al regresar se sientan en los hombros de Odin para susurrar sus noticias en su oreja. La Edda Prosaica nos dice de Odin:
Huginn y Muninn rondan cada día sobre la amplia tierra;
Temo que Huginn no ha de regresar, -
y al mismo tiempo anhelo más por Muninn (Gylfaginning, 38)
Debido a esto Odin es también conocido como "el dios cuervo". Si alguna vez has visto una batalla (o al menos una versión de una película) te darás cuenta que después que estas acaban, se hace claro como los cuervos de Odin se relacionan a su rol de dios de la guerra y su conexión con los muertos; la batalla se convierte no solo en un festín para los cuervos sino también un festín para las aves de rapiña.
Otros atributos a Odin son las Valkirias -quienes eran probablemente representadas por pequeñas figuras femeninas a veces sosteniendo un cuerno de beber, indicando su culto a Odin- y sus lobos Geri y Freki. El también pudo haber estado vinculado con el águila y la serpiente, y su potencial función como chamán significa que su bastón también es relevante.
Mitos que involucran a Odin
Considerando que tan frágil nuestro conocimiento de la mitología Nórdica es comparada a como realmente era la Era Vikinga, nuestras fuentes solo tienen tres dioses recurrentes en más de un solo mito; Odin es uno de ellos, junto a él Thor y Loki. Lo más probable es que solo tengamos las bases de las historias que la era pre-Cristiana Vikinga hubiese contado y creído sobre estos dioses. Algunos fragmentos de estas bases son las siguientes:
Antes de la creación del mundo, Búri el padre de los dioses apareció desde el hielo, y su hijo Borr y su hija-gigante Bestla engendraron a Odin y sus hermanos (usualmente llamados Vili y Vé). Los hermanos entonces liquidaron al proto-gigante Ymir y usaron su carne para crear la tierra, su cráneo para formar el cielo, sus huesos para las montañas y su sangre para formar el mar. Con una residencia en lugar, ellos luego formaron a la primera pareja humana, Ask y Embla, de dos árboles o piezas de madera.
El inmenso conocimiento de Odin es cortesía de la cabeza de Mímir (o también debido a beber de la cabeza de esta). Mímir fue un sabio consejero del cual Snorri Sturluson nos informa de como los Vanir (la familia de dioses de la fertilidad) cortaron su cabeza y se la enviaron a Odin, quién con magia y hierbas sanadoras mantiene la cabeza de descomponerse y que así pueda contarle los secretos del "otro mundo". De acuerdo a Snorri, el precio que Odin tiene que pagar por esto es uno de sus ojos. Su potenciado conocimiento reaparece en unos cuantos mitos (conocidos como la Edda Prosaica) ; en el Vafþrúðnismál Odin inicia una batalla de ingenio con el gigante Vafþrúðnir y lo vence, mientras que en el Grímnismál un Odin disfrazado es torturado y termina revelando su extenso conocimiento mitico al Rey Geirroðr.
Más aún, Snorri explica que las esplendidas habilidades poeticas de Odin se deben a que este había robado el hidromiel de los Skalds (los poetas) durmiendo con la gigante Gunnlǫð, la guardiana del hidromiel, por tres noches. Es por su complacencia hacia ella que es permitido beber tres sorbos, pero este simplemente bebe depletando los recipientes y transformándose en un águila abandona el lugar. También conectado a la poesía, Odin gana el conocimiento de las runas, atribuido en el poema de Hávamál a un sacrificio personal:
Sé que colgué en un ventoso árbol
por nueve largas noches,
herido de una lanza, dedicada a Odin,
de mí a mi mismo,
en ese árbol del cual no hombre sabe donde sus raices comienzan.
(Hávamál, 138)
Su imparable búsqueda por conocimiento es evidenciado aquí en las medidas que toma para (muy deliberadamente- sacrificarse a sí mismo para si) para desbloquear las runas; nueve noches colgando de una rama del Yggdrasil, el Árbol del Mundo, con una herida de lanza que lo dejo cerca de la muerte ahí y, sólo en ese momento, las runas fueron reveladas a él.
En el Ragnarok, la sabiduría y el poder de Odin son puestos a prueba. Catástrofes naturales que incluían un horrible invierno, al igual que Fenrir devorando el sol, presagian la llegada de las fuerzas del Inframundo, Heimdall hace sonar la alarma, la cabeza de Mímir es consultada y los dioses se refugian debajo del Yggdrasil para decidir que hacer. Sin embargo, bien preparados, una vez que la batalla estalla Odin valientemente se enfrenta a Fenrir pero conoce su fin en las mandíbulas de la criatura, muriendo junto a muchos dioses colegas quienes perecen ante enemigos pero que también liquidan a muchos en el proceso.
Culto a Odin
La creencia en Odin fue tan diversificada a través de todas las regiones Germánicas y los paralelos entre él y el dios Indio Varuna son tan inequívocos que probablemente sus origenes descanzan mucho más atrás en la tradición Indo-Germánica. Ya era en la Era de Bronce cuando existian rocas Suecas con grabados que representaban figuras de un dios sosteniendo una lanza, quién con un poco de imaginación podría vincularlo a Odin, y que por alrededor de los años 500 claramente muestra un rango de ornamentos junto a pájaros y guerreros. Las imágenes de rocas de la Era Vikinga llevan esta tendencia y lo representan cabalgando hacia el Valhalla, entre otras cosas.
Sin embargo, cuando tenemos en cuenta su posterior estatus como líder en la Mitología nórdica, una evidencia real y tangible de un culto a Odin es bastante escaso. Lugares nombrados después de Odin- un indicador decente de practicas de culto y popularidad - están completamente ausentes en Islandia entre el asentamiento y la llegada de la Cristiandad, y muy escasos en el sur de Noruega, aunque aparecen aquí y allá en el sur de Suecia y en Dinamarca. Thor, en contraste, roba todos los focos de atención y es mucho más visible en el contexto de culto que su padre. Afortunadamente, Rudolf Simek tiene una manera de aplacar nuestra confusión:
De todas maneras, pareciera probable, que las fuentes literarias lo consideraran a él para tener una elevada posición desde su propio punto de vista considerando que no puede haber ninguna duda de que Odin era el dios de la poesía (y los poetas) y nuestras fuentes las cuales vienen directamente o indirectamente -desde la sistematización de Snorri- desde los Skalds de tiempos paganos, no sorprende que muestren una particular inclinación en favor a el dios de su propio oficio. (243)
Asi que en vez de tener un culto general a Odin como el dios principal de la mitología Nórdica, hace más sentido que fuera venerado en contextos específicos bajo específicos individuos -mayoritariamente poetas, guerreros, jefes, y reyes. Espeluznantes sacrificios humanos, por ejemplo, tendían a ser exclusivamente dedicados a Odin. De otra forma, en las creencias de la Era Vikinga, él solo era un miembro más. Esto es visualmente representado en un gran templo pagano de Old Uppsala en Suecia, también; en el año 1070 Adam de Bremen escribió su primera visita a este lugar en donde una estatua de Thor se ergia prominentemente en el centro del salón, con Odin y Freyr a su lado, y que estos sacrificios eran hechos a Thor en caso de hambruna, a Odin en tiempos de guerra y a Freyr en caso de actividades relacionadas a las bodas.