Partia

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Patrick Scott Smith, M. A.
por , traducido por Rosa Baranda
Publicado el 22 julio 2019
Disponible en otros idiomas: inglés, neerlandés, francés, alemán, italiano, persa, portugués
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Statue of a Military Commander from Hatra (by Osama Shukir Muhammed Amin, Copyright)
Estatua de un comandante militar de Hatra
Osama Shukir Muhammed Amin (Copyright)

Los partos gobernaron desde 247 a.C. hasta 224 d.C., tiempo en el cual crearon un vasto imperio que abarcaba desde el Mediterráneo en el oeste hasta India y China en el este. Al este del mar Caspio surgió de las estepas de Asia Central una tribu escita nómada conocida como parnos. Más tarde pasarían a llamarse partos y se harían con el Imperio seléucida, luchando contra los romanos, y se establecerían como una superpotencia por derecho propio. Con un estilo de lucha singular e increíblemente efectivo, la inmensa área que conquistaron los puso en contacto con los productos y las influencias culturales de las diferentes regiones de su imperio. Gracias a estas influencias, los partos no solo mezclaron estilos arquitectónicos para crear su propia arquitectura parta, sino que también crearon su propio arte y vestimenta distintivamente partos.

Expansión parta

La historia de Partia empieza con Seleuco I, uno de los generales de Alejandro Magno. Tras la muerte de Alejandro, sus generales se repartieron los territorios que habían conquistado. Seleuco se quedó con Mesopotamia y otros distritos que habían sido vitales para Persia, creando así el Imperio seléucida. Seleuco adoptó la forma de gobierno persa, pero incorporó infraestructura y administradores griegos. Los distritos o satrapías gobernados por sátrapas estaban sujetos a un gobierno central y, en última instancia, al rey, y Partia se convirtió en una de esas satrapías. Pero la satrapía seléucida de Partia no tardaría en convertirse en su propio imperio.

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LA TRIBU NÓMADA DE LOS PARNOS, QUE SE CREEN QUE ESTABAN EMPARENTADOS CON LOS ESCITAS DE ASIA CENTRAL, ACABARON TOMANDO EL CONTROL DE PARTIA.

La satrapía parta, entonces en los albores de su historia política, se encontraba al sureste del mar Caspio. La tribu nómada de los parnos, que se cree que estaban emparentados con los escitas de Asia Central, acabó haciéndose con el control de Partia. Mientras los seléucidas estaban debilitados por guerras internas y por el conflicto con los Ptolomeos al oeste, los parnos se movieron hacia el este. Las puertas se abrieron para los parnos en 247 a.C. cuando el gobernador local, Andrágoras, empezó una rebelión contra el gobierno seléucida. Sabiendo que los seléucidas estaban distraídos, y que Andrágoras era débil, Arsaces (que reinó de 247-217 a.C.), primer rey de Partia, conquistó el reino. El rey seléucida Antíoco III la recuperaría en 209 a.C. Para entonces el hijo de Arsaces, Arsaces II (que reinó de 217-191 a.C.) estaba en el trono. Antíoco podría haberlo matado, pero en vez de eso lo nombró sátrapa. Puede que fuera un error.

Después de que Antíoco se marchara para regresar a Siria, la élite parta, molesta por su subordinación, depuso a Arsaces II e instaló a Priapatios (que reinó de 191-176 a.C.) como su tercer rey. Como las circunstancias volvieron a favorecer a los partos gracias a la Paz de Apamea de 188 a.C. entre romanos y seléucidas que redujo el poder de estos últimos, el hijo de Priapatios, Fraates (que reinó de 176-171 a.C.) atacó el imperio. Al conquistar a los amardos, Fraates se hizo con la región entre Hircania al este y Media al suroeste. De esta manera, Fraates hizo que el futuro de Partia comenzara, pero al elegir a su hermano Mitrídates (que reinó de 171-132 a.C.) como sucesor, Partia vería su mayor expansión.

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The Parthian Empire in the 2nd Century
El Imperio parto en el siglo II
Simeon Netchev (CC BY-NC-ND)

Mitrídates volvió la vista inmediatamente al este para conquistar Bactria, vecina de India y China, en torno a 168 a.C. Después, como quería aumentar las ganancias conseguidas por Fraates, se volvió hacia Media. Tras una guerra de nueve años en la que se encontraron con una resistencia considerable, Partia logró añadir Media a su expansión territorial en 151 a.C. Tras un paréntesis de cuatro años en Hicarnia, posiblemente para reformar sus fuerzas armadas, Mitrídates pensó que era el momento de dirigirse aún más hacia el oeste hacia el importante creciente fértil del Éufrates y el Tigris conocido como Mesopotamia. En torno a 144 a.C. capturó Seleucia, la antigua capital seléucida. En 141 a.C. tomó Babilonia. Mitrídates, que pudo repeler la campaña de Demetrio II para retomar el territorio seléucida en 138 a.C., se dirigió al sur para conquistar el país elamita y la capital de Susa. Como querían recuperar su territorio, los seléucidas volvieron a atacar a los partos. Fraates II (que reinó de 132-127 a.C.), hijo de Mitrídates, mataría al rey seléucida Antíoco VII en batalla, pero moriría a su vez al intentar aplastar un motín escita. Tras la muerte de Fraates II los levantamientos en el territorio de Partia abundarían. ¿Acabaría disolviéndose el imperio? Artabano I y su hijo Mitrídates II tendrían un papel esencial.

El tío de Fraates II, Artabano II (que reinó en torno a 127-124 a.C.) lograría aplastar las revueltas en Elam, Caracene y Babilonia, pero su reinado terminó abruptamente cuando murió en la batalla contra los Yuezhi en el este. Su hijo, Mitrídates II (r. 124-88 a.C.) tomaría el control y se convertiría en el mayor gobernante de Partia. Mitrídates no solo fortalecería la influencia de Partia en Elam, Caracene, Mesopotamia y Bactria, sino que también añadió Albania y Armenia y capturó la ciudad siria de Dura-Europos en occidente. Con unas fronteras que ahora abarcaban desde el mar Mediterráneo hasta China, Partia se convirtió en un gigante geográfico y una verdadera superpotencia.

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Map Roman-Parthian War, 58-60 CE
Mapa de la guerra romano-parta, 58-60 d.C.
Cplakidas (CC BY-SA)

El Imperio parto volvería a experimentar dificultades serias, esta vez procedentes de Roma. Fraates III (que reinó de 70-57 a.C.) perdería Armenia, Albania y Corduena en el norte de Mesopotamia a manos de los romanos, lo que hizo que sus hijos lo asesinaran. Después de que estallara la guerra civil, cuando Orodes II (que reinó de 57-37 a.C.) mató a su hermano Mitrídates III y reconquistó la capital de Seleucia, llegó el momento de las victorias partas. En 53 a.C., Craso, el triunviro romano, invadió Partia cerca de Carras. Orodes envió a su general Surena a lidiar con el problema. Sirviéndose de una fuerza abrumadora de arqueros partos a caballo, derrotó por completo a Craso y tomó los estandartes romanos, un duro golpe psicológico para Roma. Después, para colmo, los partos recuperaron Armenia tras la derrota de Marco Antonio en 32 a.C. Estas dos derrotas hicieron que Roma se sentara a la mesa de negociaciones. Para evitar que continuara un conflicto que habría debilitado significativamente las avanzadas que habían ganado ambas partes, se llegó a un acuerdo que le permitió al Imperio parto poner sus miras al este. Tal y como afirma acertadamente Raoul McLaughlin:

En 20 a.C. Augusto acordó una paz a largo plazo con el rey parto Fraates IV. Este acuerdo les permitió a ambos gobernantes concentrarse en sus actividades militares en sus otras fronteras y agrandar así sus respectivos imperios. (181)

Tácticas militares partas

EL ARQUERO PARTO, QUE ERA CAPAZ DE DISPARAR HACIA ATRÁS MIENTRAS IBA A PLENO GALOPE, DISPARABA A MATAR A LA CABALLERÍA QUE LO PERSEGUÍA.

Un elemento clave de muchas victorias partas y de la expansión del Imperio parto fue su uso singular del caballo y el arco. Con un estilo de lucha en el que golpeaban y se retiraban, las tácticas partas, incluido fingir la huida, eran adecuadas para enfrentarse a los movimientos concentrados de tropas de otras naciones. Los arqueros iban montados en los caballos más rápidos y tenían jinetes a lomos de camellos que les suministraban las flechas, con lo que la infantería se convertía en un blanco fácil incapaz de atacar excepto a corta distancia. Cuando la caballería del enemigo empezaba a perseguirlos, los partos tenían la respuesta. Eran tan hábiles en este arte letal que desarrollaron el llamado "disparo parto". El arquero parto, que era capaz de disparar hacia atrás mientras iba a pleno galope, disparaba a matar a la caballería que lo perseguía. Así, los jinetes partos podían atacar a las tropas enemigas desde todas direcciones y con ello creaban confusión y sembraban el caos. Por último, su caballería pesada (los catafractos) proporcionaba el apoyo ofensivo y la ayuda para terminar con los grupos de resistencia que pudieran quedar con lanzas largas y espadas.

Parthian Cataphract
Representación artística de un catafracto parto
Simeon Netchev (CC BY-NC-ND)

El gobierno parto

La forma de gobierno parto era una amalgama de las respuestas prácticas a las necesidades locales. Nunca se puso en duda el poder en la cima del gobierno. El "rey de reyes", como se autodenominaban los gobernantes partos más tarde, exigían la lealtad absoluta, pero el sentido práctico del gobierno parto queda claro ya desde el principio cuando Mitrídates I mantuvo a los nobles griegos en puestos de liderazgo para garantizar la continuidad de los asuntos económicos y burocráticos. De hecho, Mitrídates se solía referir a sí mismo como "Filheleno", amante de la cultura griega. Los asentamientos griegos de todo el imperio pudieron continuar como hasta entonces, siempre y cuando pagaran su tributo al rey.

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Además, las rebeliones vividas por los seléucidas se evitaron al dividir las provincias en satrapías más pequeñas llamadas eparquías. De esa manera, se eliminó la concentración de poder regional en manos de una sola persona. Los partos también les permitieron a los reinos conquistados de su imperio conservar sus propios reyes. Con esto disponían de ingresos procedentes de tributos y ayuda militar cuando era necesaria.

Economía y comercio

Con los romanos a raya, Partia pudo probar su suerte en el comercio. Tal y como menciona Richard Frye:

Los pequeños estados del Creciente Fértil, que favorecían la forma de gobierno descentralizada "feudal" parta, se desarrollaron mucho como centros mercantiles de comercio internacional. Los primeros dos siglos de nuestra era fueron una época de comercio, y los estados oasis del Creciente Fértil florecieron como nunca antes. (18)

El desarrollo comercial parto empezó con la infraestructura heredada de los seléucidas. Tuvieron la suficiente previsión como para conservar las ciudades y caminos que recibieron. Su posesión de Armenia y el posible acceso al mar Negro, junto con el control de Hircania y el mar Caspio, les dio acceso a los mercados de Asia Central. Al hacerse con la región de Persia y de ciudades como Antioquía en el Golfo Pérsico también obtuvieron acceso a los mercados indios por mar. El control de Elam y la ciudad de Susa, políticamente importante, y de la región fértil de Media y su rica ciudad de Ecbatana debieron de enriquecer a los partos tanto material como culturalmente.

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Silver Coin of a Parthian King
Moneda de plata de un rey parto
Osama Shukir Muhammed Amin (Copyright)

Una de las posesiones más preciadas de Partia habría sido el Camino Real. Este camino transcurría de este a oeste a través de Mesopotamia y solidificó la posición de Partia como comerciante internacional: con él llegaron Bagdad y Seleucia como puertas de entrada a occidente. Después se extendió hacia el este para llegar a Bactria, vecina de India, con lo que los accesos a los mercados orientales se hicieron directos y lucrativos. Por último, el comercio con China se convirtió en una posibilidad real. Según Wang Tao,

Ahora sabemos que, ya en el tercer milenio a.C., existía una red [de caminos] en la estepa euroasiática que se extendían desde el mar Caspio en el oeste hasta la cuenca del Tarim en el este. (87)

Con la política expansionista de la China de la Dinastía Han se estableció el contacto con Occidente. Según los cronistas chinos, sus emisarios visitaron Partia en 115 a.C. Puede que el intercambio simbólico de artículos de comercio entre el rey parto y los representantes chinos sentara un precedente para acuerdos comerciales más amplios en el futuro.

Arte y arquitectura partos

Debido a la ubicación de su imperio, y a sus orígenes en Asia Central, los partos tenían en lo básico una amplia gama de influencias en lo referido al arte y la arquitectura. Daryoosh Akbarzadeh describe Partia de la siguiente manera:

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Los restos arqueológicos atestiguan la grandeza de la cultura y el arte en la era parta. La herencia cultural asociada con esta época se ha descubierto en una vasta extensión, desde las fronteras de China y Asia Central hasta Mesopotamia y Siria al oeste. (76)

Algunos eruditos han conjeturado que el alejamiento de Partia de las influencias helenísticas se debió a su competición con Roma. En cualquier caso, a diferencia de los griegos seléucidas, los partos desarrollaron su propio estilo artístico y arquitectónico característico. Con elementos tomados de oriente y occidente, su estilo era una amalgama fácil de reconocer como parta. Su arquitectura y su arte utilizaban, respectivamente, motivos circulares y frontales interesantes.

Arquitectónicamente, los partos dejaron en su lugar las estructuras que, bajo el gobierno griego seléucida, copiaban naturalmente la disposición rectangular helenística con columnas y elementos triangulares tan conocidos y copiados en Occidente incluso hoy en día, pero allá donde podían, los partos quisieron diferenciarse. A la entrada de un templo griego o romano, hay que pasar por un pórtico de columnas. La entrada del templo parto de Hatra recibe a los visitantes con elegantes arcos. La mezcla de columnas y frontones triangulares de estilo griego con los arcos múltiples partos de Hatra de otorga al templo su particular atractivo exterior. En la Assur parta, los arcos partos destacan otra vez. Pero el uso de la circularidad como característica arquitectónica durante el periodo parto también se revela de otras maneras.

Parthian Architectural Ornament from Ashur
Ornamento arquitectónico parto de Ashur
Osama Shukir Muhammed Amin (Copyright)

Con reminiscencias de la fortaleza corasmiana totalmente circular en Koi Krylgan Kala (en torno a 400 a.C. - 400 d.C.) al este del mar Caspio, ciudades enteras y fortalezas partas también se dispusieron de forma circular. En una comparación entre la planificación rectangular seléucida y persa y algunos enclaves partos, Malcolm Colledge dice:

Se presentó un enfoque de planificación muy diferente con la forma vagamente circular de varias ciudades bajo el control o la influencia partas; la refundación parta de Ctesifonte, las murallas entorno a Carras, Tajt-e Soleimán y Hatra de alrededor del primer milenio d.C. eran más claramente, y deliberadamente, circulares. (34)

En Nisa, su capital original, los partos volvieron a elegir el diseño circular como una de las principales características arquitectónicas. En esta ciudad, los arquitectos partos construyeron una cúpula que dominaba el horizonte de la ciudad. A diferencia de las cúpulas romanas, que se asentaban sobre estructuras de sujeción, las paredes de la cúpula de Nisa bajaban hasta el suelo. Un edificio cuadrado circundante contenía el empuje hacia el exterior de las paredes de la cúpula. La influencia de Asia Central puede que, de nuevo, procediera de Corasmia.

Mientras que la arquitectura parta incorporaba elementos circulares de una manera única, en el arte se incluiría el motivo de la frontalidad. En un estilo que más adelante adoptarían los bizantinos, los modelos partos miraban hacia adelante, creando así una conexión personal entre el modelo y el espectador. A menudo, también prescindían de las expresiones más sobrias de griegos y romanos. De una manera que profundiza la relación directa entre sujeto y espectador, algunas de las figuras resultan incluso amigables. Además, aparte de la fabricación creativa de joyería de metales preciosos, bronce, terracota y estatuas de piedra, las paredes interiores ornamentadas son, de nuevo, testamento de las elecciones y la creatividad artística partas. La superficie de las paredes de Assur estaba ricamente decoradas con estuco labrado con patrones geométricos y florales. Estas decoraciones habrían alegrado cualquier habitación con la aplicación de colores complementarios y contrastantes.

Cultura y religión

Aunque en ciertos aspectos los partos eran liberales en su variedad de usos de estilos artísticos y arquitectónicos, en lo referido a la ropa la norma era una mayor uniformidad, al menos entre las clases gobernantes. Coincidiendo con el punto álgido del poder del imperio, para finales del siglo I a.C. la túnica con cinturón y el traje de pantalón se hicieron populares por todo el imperio. La ropa holgada con múltiples pliegues horizontales, a veces de manera exagerada, se convirtieron en moda. Entre los nobles partos era común lucir bigotes largos, a menudo con barbas muy cortas y cuidadas, y su apariencia personal también incluía un peinado cardado de largura media, sujeto con una diadema.

Statue of a Young Military Commander, Hatra
Estatua de un joven comandante militar, Hatra
Osama Shukir Muhammed Amin (Copyright)

Saber distinguir a los gobernantes por su atuendo habría resultado esencial en un reino vasto con creencias y fes variadas. Como elegir una creencia por encima de las demás habría causado una rebelión, la diversidad de religiones dentro del imperio aumentó la necesidad de la uniformidad de la vestimenta entre los gobernantes partos. Aunque el dualismo del bien contra el mal del zoroastrismo y su dios supremo Ahura Mazda estaban muy extendidos, la veneración de los elementos (ríos, lagos, árboles, el mar, las piedras) todavía se practicaba en la Partia occidental. Los seléucidas, como eran griegos, tenían su panteón de dioses, y aunque los babilonios todavía veneraban a los dioses de la fertilidad Ishtar y Bel, había un enclave judío en Mesopotamia que veneraba a Yahvé. Allí donde se había venerado a los dioses del sol y la luna en Hatra, los cristianos al este del Tigris fueron ganando terreno hacia finales del periodo parto. Es difícil saber en qué creían los propios partos, pero resulta evidente que, como señores de la tierra, toleraban las diferentes creencias, un aspecto clave para que gobernaran durante 500 años.

Declive y caída

Tras las victorias militares sobre Craso y Marco Antonio, y el acuerdo de paz con Roma en 20 a.C., puede que los partos pensaran que su imperio estaba seguro, pero de una manera casi de efecto dominó, las invasiones externas y la disensión interna acabarían pasando factura. Aunque Artabano II (que reinó de 10-38 d.C.) logró lidiar con las rebeliones provinciales y ganó la lucha por el control contra su hermano, Vorones II, la presión exterior en las fronteras oriental y occidental de Partia se estaba acercando. Por el oeste, en 115 d.C. el emperador romano Trajano invadió Partia, conquistó Mesopotamia y saqueó las capitales de Seleucia y Ctesifonte. Después, por el este, respaldando la documentación oriental de la guerra entre los partos y los kusanos, el caudillo kusano Kanishka (120-144 a.C.) establecería su imperio en Bactria, que en algún tiempo había sido la provincia más oriental de Partia.

De vuelta en el oeste, aunque las fuerzas enviadas por Trajano se retiraron, Roma regresaría a Partia una vez más, en torno a 165 d.C., durante el reinado de Vologases IV (147-191 d.C.). El emperador Lucio Vero ganaría varias batallas y volvería a saquear Seleucia y Ctesifonte. De alguna manera, los partos lograron expulsar a los romanos, pero regresaron en 198 d.C. Aunque el emperador Septimio Severo tuvo que marcharse por la escasez de alimentos, Mesopotamia quedaría devastada por tercera vez en un corto período de 83 años, y el Imperio parto quedaría seriamente debilitado.

Al final, en el siglo III, cuando Artabano IV (que reinó de 213-224 d.C.), rey de Media, se rebeló contra su hermano Vologaso IV (208-213 d.C.), esto sentó el precedente para que Partia, muy debilitada, fuera derrotada por otro rey rebelde, Ardacher, que fundó el Imperio sasánida en 224 d.C.

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Sobre el traductor

Rosa Baranda
Traductora de inglés y francés a español. Muy interesada en la historia, especialmente en la antigua Grecia y Egipto. Actualmente trabaja escribiendo subtítulos para clases en línea y traduciendo textos de historia y filosofía, entre otras cosas.

Sobre el autor

Patrick Scott Smith, M. A.
Después de haber presentado trabajos de investigación no sólo para la American Society of Overseas Research (ASOR; es decir, la Sociedad estadounidense de Investigación en el Extranjero), sino también para la Academia de Ciencias de Missouri; y escrito para la Association for the Scientific Study of Religion (Asociación para el Estudio Científico de la Religión), el magíster Patrick Scott Smith fue galardonado en el año 2015 y en el 2024 con el Premio Frank P. Forwood a la excelencia en materia de investigación.

Cita este trabajo

Estilo APA

A., P. S. S. M. (2019, julio 22). Partia [Parthia (Empire)]. (R. Baranda, Traductor). World History Encyclopedia. Recuperado de https://www.worldhistory.org/trans/es/1-18370/partia/

Estilo Chicago

A., Patrick Scott Smith, M.. "Partia." Traducido por Rosa Baranda. World History Encyclopedia. Última modificación julio 22, 2019. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-18370/partia/.

Estilo MLA

A., Patrick Scott Smith, M.. "Partia." Traducido por Rosa Baranda. World History Encyclopedia. World History Encyclopedia, 22 jul 2019. Web. 18 dic 2024.

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