Enrique III reinó del 1216-1272 EC. Era hijo del impopular rey Juan de Inglaterra (1199-1216 EC), Enrique de inmediato se encaró de inmediatamente la guerra de los barones que estaba en curso que se alimentó debido al descontento sobre el gobierno de Juan y su incumplimiento a la carta magna sobre las facultades del mismo. Enrique y su regente Sir Guillermo Marshal derrotaron a los barones rebeldes en la batalla de Lincoln en el 1217 EC, pero su reinado estuvo plagado de problemas desde entonces. Tradicionalmente es visto como un rey débil y varias veces inefectivo, Enrique como su padre antes de él, desperdició dinero en campañas militares sin resultados, y estas requirieron impuestos tan altos que los barones se revelaron una segunda vez. El líder rebelde Simón de Montford (1208-1265 EC) capturó a Enrique y se convirtió en el hombre más poderoso del reino en el 1265 EC). Afortunadamente para Enrique, su hijo Eduardo levantó un ejército y derrotó a Montfort en Evesham en el 1265 EC. Enrique fue restaurado pero pasó muchos de sus últimos años apartado de la política y mejorando monumentos arquitectónicos tales como la abadía de Westminster y la catedral de Lincoln. Siguiendo a la muerte de Enrique por causas naturales en el 1272 EC, el príncipe Eduardo quién había sido regente de su padre en muchos aspectos, se convirtió en Eduardo I de Inglaterra (1272-1307 EC).
Sucesión
Enrique nació el 1 de Octubre del 1207 EC, en el palacio de Winchester en Hampshire, era el hijo del rey Juan de Inglaterra y la reina Isabel de Angulema (1188-1246). El joven príncipe sería arrojado al centro de atención del estado antes de que cualquier preparación fuera posible. El rey Juan murió de fiebre el 18 de Octubre del 1216 EC cuando Enrique todavía tenía los nueve años de edad. El rey había muerto en medio de la primera guerra de los barones (1215-1217 EC) que fue causada debido a que éste no había cumplido las promesas establecidas en la carta magna en Junio del 1215 EC. Esta carta de libertades establecía que incluso el soberano estaba sujeto al cumplimiento de la ley y los barones debían ser consultados sobre los asuntos que les afectaban. Algunos de estos aristócratas estaban tan molestos con su rey actual, que incluso apoyaron a Luis (futuro Luis VIII de Francia 1223-1226 EC) como remplazo. Luis había invadido la Inglaterra del sur y capturó muchos de los castillos más importantes, incluyendo la torre de Londres, en Mayo del 1216 EC, Luis incluso se proclamó rey basándose en el hecho de estar casado con Blanca de Castilla, nieta de Enrique II de Inglaterra (1154-1189 EC).
En medio de la confusión, Enrique III sucedió a su padre y fue nombrado rey el 28 de Octubre del 1216 EC en la catedral de Gloucester. La ceremonia apresurada fue aún más afectada por la ausencia del obispo de Canterbury (quién estaba en Roma) y la falta de insignias reales, el rey Juan habiendo perdido las joyas de la corona, en arenas movedizas, cuando huía de los barones rebeldes. En ausencia de una corona con linaje, en su lugar se utilizó un collar de torsión de oro de la madre de enrique, la reina Isabel.
La primera tarea de Enrique fue poner fin a la guerra civil que arruinó a su reino. Enrique tenía sólo nueve años pero contaba con la ayuda de figuras tales como: Pedro de Roches y Humberto de Burgh (1243 EC) y verdaderamente un gran aliado: Sir Guillermo Marshal, conde de Pembroke (1146-1219 EC), a menudo considerado el caballero medieval más grande de todos. Marshal ya había servido a tres reyes y ahora había sido nombrado protector del reino. Y fue de facto, el regente de Inglaterra para el joven Enrique. Esta improbable pareja de un niño rey y un caballero de 70 años, probaría ser una ganadora.
La guerra de los barones y Guillermo Marshal
De manera crucial, el rey se aferró a mantener el castillo de Windsor y el castillo de Dover para que Enrique pudiera enfrentar a los barones rebeldes restantes, y al príncipe Luis en Lincoln el 20 de Mayo del 1217 EC. Marshal en persona lideró el ejército inglés, y justo antes de la batalla dio un discurso motivacional a sus tropas de primera línea, declarando que el enemigo había colocado sus fuerzas de tal manera que él ganaría el día porque podía atacar con todo su ejército en una sola sección y así resultó. Los refuerzos franceses constantes de 80 barcos fueron hundidos el 24 de Agosto por una flota inglesa de 40 barcos comandados por Humberto de Burgh. La flota inglesa fingió un ataque pero luego maniobró para atacar a los franceses a favor del viento. Se lanzaron ballestas u ollas de cal viva contra el enemigo y en la confusión sólo sobrevivieron 15 barcos franceses. Después de la doble derrota, Luis renunció a su derecho al trono inglés en un tratado firmado en Septiembre del 1217 EC. La victoria le permitió a Enrique disfrutar una coronación adecuada, llena de pompa y ceremonia en la abadía de Westminster el 17 de Mayo del 1220 EC. Guillermo Marshal, mientras tanto y después de servir a cuatro reyes durante su ilustre vida, murió el 14 de Mayo del 1219 EC. El nuevo regente fue Humberto Burgh, que se había desempeñado como justiciar y derrotó a la armada francesa, pero sólo lo necesitarían unos pocos años más.
Reinado y críticas
Enrique asumió el gobierno directo en Enero del 1227 EC, a los 20 años. El historiador Dan Jones da la siguiente descripción del rey:
El hombre que emergió del largo camino de la niñez fue un espécimen peculiar, Enrique medía 1.70 mts. de altura. Se dice que tenía los parpados caídos, lo que le habría dado a su rostro una solemnidad que no coincidía con su carácter pesado. Era notablemente piadoso, incluso en una época en la que la moda creciente entre la nobleza era el ascetismo y la religiosidad ostentosa (236).
Lo que le faltaba al rey en buena apariencia, ciertamente lo compensaba con longevidad. Sin embargo el rey rápidamente se ganó la reputación de ser indeciso y fácil de influir. Peor aún, los barones nunca lo aceptaron, percibiéndolo tan arrogante con sus derechos e irrespetuosos con los de ellos cómo lo había sido Juan. Otra crítica fue que el rey era demasiado generoso con las concesiones de tierras a los extranjeros. Esto empeoró después de su matrimonio con Leonor de Provenza (1223-1291 EC) el 20 de Enero del 1236 EC, y una afluencia de parientes políticos franceses tomó posiciones clave de la corte, incluso convirtiéndose en consejeros cercanos del rey y alimentando su idea incendiaria de que el monarca tenía autoridad absoluta y no necesitaba escuchar a sus barones.
Enrique tenía también algunos actos a su favor, al menos desde el punto de vista de la posteridad. El rey fue un gran mecenas de las artes y patrocinó muchos proyectos de construcción importantes, como la nueva catedral de St. Albans (santa Elba), la catedral de Lincoln, la catedral de Wells en Somerset y la catedral de Salisbury. Hubo una importante actualización del palacio de Westminster, lo que hizo que la residencia real tradicional, fuera más cómoda con nuevas ventanas, chimeneas, pinturas murales y tuberías. La abadía de Westminster fue renovada con un estilo gótico y en ella se construyó un magnífico santuario nuevo para el antiguo rey Eduardo el confesor (1042-1066 EC). El rey también le dio a la abadía un frasco de cristal que se pensaba contenía la sangre de Jesucristo. Otro edificio que recibió la atención del rey fue la torre de Londres. Enrique probablemente empezó el zoológico allí, que permanecería hasta el 1835 EC. Los primeros animales solían ser regalos diplomáticos como leopardos, un elefante e incluso un oso polar. Finalmente, el rey estaba muy interesado en la educación y entre el 1249 y el 1264 EC, el creó o fundó los primeros tres colegios como: la universidad de Oxford, el colegio de Merton Balliol y la universidad.
Sin embargo, los logros arquitectónicos y educativos no fueron las maneras de ganarse a sus súbditos, y en cualquier caso éstos, fueron realizados durante su última década de gobierno y ciertamente no hicieron nada por detener la reacción negativa a las fuertes políticas de impuestos del rey. Una serie de derrotas en Gales (entre el 1228 al 1231 y luego en el 1232 EC) que llevaron a Enrique a conferir a Llywelyn ap Gruffudd (1243-1254 EC) el título de príncipe de Gales. Tuvo otro fracaso en el intento fallido por colocar a su segundo hijo el príncipe Edmundo, como rey de Sicilia coludiéndose con el papa Inocencio IV (1243-1254 EC). Posteriormente, realizó campañas ineficaces a través del canal del 1228 al 1230 EC (lideradas por el rey en persona) y en el 1242 EC, resultando en la pérdida final de territorios en Francia, firmando el tratado de París en el 1259 EC el cual no dejaba nada para la corona inglesa salvo Gascuña. Por último el arreglo del rey sobre la boda de su hermana Isabel con el Emperador del santo imperio Romano Germánico Federico II (1220-1250 EC) un acto respaldado por el consejo gobernante pero que requirió grandes dotes de efectivo, que estiró el sistema de impuestos hasta el límite. En resumen, Enrique con unos ingresos anuales que eran, la mitad de los que tenía su homólogo Francés Luis IX de Francia (1226-1270 EC), vivía día a día fuera de sus posibilidades.
Simón de Montfort y la guerra civil
Todas estas decepciones, exasperaron a los barones a tal grado, que algunos apoyaron al cuñado del rey Simón de Montford conde de Leicester, y lo convirtieron en co-gobernante de hecho, gracias a las "provisiones de Oxford" (Junio de 1258 EC) establecen que los impuestos deben ir al tesoro y no estar disponible para los caprichos de la monarquía y que un consejo de 15 barones debía asesorar al rey. El consejo también debía controlar los castillos reales, supervisar los nombramientos ministeriales (en los que Enrique era muy laxo) y controlar la administración local. Otro organismo que algunos historiadores acreditan a De Motfort fue el llamado parlamento, cuando invitó a algunos de los caballeros de distintos condados y burgueses de ciertos distritos a participar, comenzó el Parlamento inglés. El parlamento también fue diseñado para asegurarse que el concilio cumpliera con su deber.
En el 1261 EC Enrique pidió al papa que restaurara su control total del reino y repudió las provisiones de Oxford en el 1262 EC, una decisión respaldada por Luis IX de Francia. En consecuencia, inició una guerra civil el 14 de Mayo del 1264 EC De Montfort capturó a Enrique y a su hijo el príncipe Eduardo en la batalla de Lewes. Durante todo el siguiente año Enrique fue llevado ignominiosamente como uno más de los viajeros que iban con Montfort. Aunque Simón se proclamó rey, él se llamó "mayordomo" y obligó a Enrique a firmar leyes y decretos a su favor, Eduardo logró escapar de sus captores en el 1365 EC. El príncipe entonces, reunió un ejército de seguidores leales a su padre y estos barones ya estaban disgustados con Simón de Montfort por egoísta. El 4 de Agosto del 1265 EC, en la batalla de Evesham en Worcestershire, Eduardo salió victorioso gracias a que tenía un ejército más grande que su oponente, Montfort fue asesinado y después fue terriblemente mutilado. Eduardo reinstaló a su padre en el trono pero asumió él mismo algunas de las funciones del día a día en el reino. Parecía entonces, que Enrique estaba destinado a compartir el poder en ambos extremos de su reinado.
Muerte y sucesor
Enrique murió, probablemente de un derrame cerebral, el 16 de Noviembre del 1272 EC a los 65 años; había reinado impresionantemente por 56 años un récord que no sería batido por hasta Jorge III de Inglaterra ( 1760-1820 EC) Él fue enterrado en la abadía de Westminster y sucedido por su hijo quién ya había estado gobernando en su nombre y quién ahora se convirtió en Eduardo I de Inglaterra, Eduardo fue coronado el 19 de Agosto del 1274 EC en la abadía de Westminster y reinaría hasta 1307 EC. El nuevo rey subyugaría a Gales, haría un buen intento en conquistar Escocia, se embarcaría en lo que fue llamada la novena cruzada (1271-72 EC) y construyó muchos castillos que sobreviven hasta hoy, particularmente en el norte de Gales