Donato Bramante (alrededor de 1444-1514 d.C.) fue un arquitecto italiano del Renacimiento, cuyo proyecto más famoso fue el diseño de la nueva Basílica de San Pedro en Roma; esto se le atribuye aun cuando la obra no había sido terminada a la hora de su muerte. Bramante también diseñó el influyente Tempietto di San Pietro (Templete de San Pedro), un templo circular en Roma inspirado de la arquitectura clásica, así como partes de la Basílica de Sant’Ambrogio (san Ambrosio) y del complejo del monasterio, ambos en Milán. El Palazzo Caprini en Roma, con sus arcadas en el piso inferior y sus columnas clásicas en el superior, ha influido desde entonces en la construcción de edificios palaciegos. Gracias a estas obras, se justifica que a Bramante se lo considere como el padre fundador de la arquitectura del Alto Renacimiento y como un maestro de la nueva interpretación de los elementos provenientes de la Antigüedad clásica para crear edificios simples a la vez que elegantes construidos a gran escala.
Juventud
Donato Bramante, cuyo nombre de pila era Donato di Pascuccio, nació alrededor del año 1444, cerca de Urbino, en Italia. Sus padres eran campesinos y su padre, quien deseaba que su hijo tuviera una vida mejor, lo envió a la ciudad para que estudiara pintura. Bramante pudo haber sido un aprendiz en el taller del artista Piero della Francesca (alrededor de 1420-1492) en Urbino. Desde el principio, Bramante se interesó en los efectos de perspectiva que Andrea Mantegna (alrededor de 1431-1506) empleaba en sus pinturas y frescos. Lo interesante en la futura carrera de Bramante es que estas técnicas ilusorias requerían con mucha frecuencia de elementos de arquitectura. En 1477, Bramante se mudó a Bérgamo donde se sabe que pintó murales; algunos de estos efectos fueron logrados utilizando la técnica de trampantojo. Desafortunadamente, solo quedan fragmentos de estas obras. No sobrevivió ningún detalle biográfico de lo que hizo el artista hasta la mitad de su treintena, ni tampoco hay ninguna pintura o dibujo completo que se le pueda atribuir con certeza, aunque pareciera que nunca dejó de pintar del todo.
Los años en Milán
Bramante vivió y trabajó en Milán desde 1480. Allí pasó un tiempo en la corte de Ludovico Sforza, quien gobernó como regente y luego como duque de Milán (1480-1494 y 1494-1499, respectivamente). El primer registro histórico de que se pasó a la arquitectura aparece en 1485 y quizás se vio influido por el contacto con Leonardo da Vinci (1452-1519), quien en 1482 se había transferido a la corte de Ludovico. Leonardo y Bramante intercambiaban correspondencia y el primero debió introducir al segundo al célebre arquitecto florentino Filippo Brunelleschi (1377-1446), quien como sabemos diseñó la grandiosa cúpula de la catedral de Florencia y cuyas opiniones sobre perspectiva, así como la reconsideración de los espacios arquitectónicos y urbanos, fueron influyentes durante el Renacimiento. Brunelleschi promovió las proporciones clásicas, la geometría simple y la armonía en un nuevo lenguaje arquitectónico, lo que supuso un reto en contra del dominio de la arquitectura medieval hasta entonces imperante. Otra influencia sobre Bramante fue la obra del arquitecto Leon Battista Alberti (1404-1472), quien también fue un defensor de la reutilización audaz de las características de la arquitectura clásica.
El primer proyecto arquitectónico conocido de Bramante fue la iglesia de Santa Maria Presso San Satiro, destacada por su coro ilusionista, lo que hace que el interior de la iglesia parezca mucho más amplio de lo que es en realidad. La parte exterior al este aporta otra ilusión óptica y así, toda la iglesia ya indica la forma en que Bramante hizo uso de su aprendizaje como pintor y así difiere de sus predecesores, tal como lo nota el historiador Peter Murray:
Esta sensibilidad por los espacios arquitectónicos que siente como una serie de planos y vacíos, como en pintura, en vez de una serie de sólidos tridimensionales, como en escultura, distingue a Bramante de Brunelleschi y de la mayoría de los arquitectos florentinos de su misma generación.
(Murray, The Architecture of the Italian Renaissance, p. 106.)[1]
Entre 1492 y 1497 trabajó en Milán, en la iglesia Santa Maria delle Grazie (de las Gracias), hoy día famosa por el refectorio de su convento, hogar de Il Cenacolo (La última cena), obra de Leonardo da Vinci. Es probable que Bramante haya diseñado y construido el nuevo ábside, el transepto, el crucero y la cúpula de dicha iglesia.
Otro proyecto de la misma época fue la nueva canonica (la residencia del clero) y el claustro para la Basílica de Sant’Ambrogio, el santo patrón de Milán. Algunas de las columnas tienen pequeñas hendiduras y estas representan las ramas principales que se cortaron en reconocimiento de que en la Antigüedad, las primeras columnas fueron hechas con los troncos de los árboles. Bramante diseñó otros dos claustros para el monasterio adyacente, que hoy en día constituyen una parte elegante de la Universidad Católica de Milán.
En 1493, el arquitecto recibió instrucciones de Ludovico Sforza para que evaluara las fortificaciones a lo largo de la frontera de Lombardía con Suiza. Otra tarea que le dio Ludovico fue el diseño y la organización de los espectáculos públicos. Entre 1492 y 1494, Bramante continuó moviéndose alrededor de la región de Lombardía, probablemente diseñando la enorme plaza rectangular en Vigevano. Aunque siempre estaba ocupado con los muchos proyectos de sus principales mecenas, sabemos que en su tiempo de ocio, el arquitecto escribía sonetos y era un músico diletante. La poesía de Bramante revela que tenía un agudo sentido del humor y que era un hombre que no se tomaba ni a sí mismo ni a su vida demasiado en serio.
Traslado a Roma
En 1499, Bramante cambió su residencia a Roma. Probablemente dejó Milán persuadido de la inminente invasión francesa hacia finales de ese año. Roma, con sus pudientes mecenas y abundancia de edificios antiguos, era una opción atractiva para un arquitecto con experiencia e interesado en la Antigüedad. Consiguió empleo rápidamente y en 1500, Bramante diseñó el claustro para la iglesia Santa Maria della Pace (Paz).
En 1501 diseñó el Palacio Caprini, también conocido como la «Casa de Rafael» después de que el artista Rafael (1483-1520) empezara a vivir allí a partir de 1517. Ahora el edificio está irreconocible después de la restauración realizada en los últimos años del siglo XVI. Sin embargo, la versión de Bramante, con su planta alta de órdenes clásicos y su planta baja de carácter rústico con sus arcos frontales combinados para crear una fachada estrictamente simétrica, fue muy influyente durante los siguientes dos siglos en la construcción de los edificios palaciegos en Italia. Hay otra conexión entre Bramante y Rafael, al menos esto es lo que nos cuenta el historiador del arte Giorgio Vasari (1511-1574) en su libro Las vidas de los más excelentes arquitectos, pintores y escultores italianos desde Cimabue a nuestros tiempos (publicado en 1550 y revisado en 1568). Vasari afirma que Bramante diseñó los elementos arquitectónicos para el fresco de la Escuela de Atenas de Rafael, que se encuentra en el Vaticano (alrededor de 1511), y como un gesto de agradecimiento, el artista pintó a Bramante en la escena que representa al matemático griego Euclides (activo en el año 300 a.C.). Se puede ver el retrato de Bramante representado como tal en el fresco de la pared opuesta, La disputa del Sacramento, que también es obra de Rafael. Bramante aparece en el primer plano, a la izquierda, enseñándole un libro al pintor Fra Angelico (alrededor de 1395-1455).
Al trabajar para el papa Alejandro VI (pontífice entre 1492 y 1503), Bramante probablemente fue el diseñador de numerosas fuentes monumentales, entre ellas se destacan las que se encuentran en la Plaza Santa María y en la Plaza de San Pedro. En 1502, Bramante recibió el encargo de diseñar y de construir el Templeto circular de San Pedro en Montorio, también en Roma. El edificio, que se sitúa en el lugar considerado como el de la crucifixión de san Pedro, fue terminado alrededor de 1510 y fue la primera estructura del Renacimiento en usar el orden dórico completo de la Antigüedad. El diseño es un excelente ejemplo del pensamiento humanístico del Renacimiento expresado en arquitectura. Las 16 columnas clásicas, que, como corresponde, fueron todas recuperadas de edificios antiguos, no solo son elegantes y sin decoración, sino que también el diseño del templo en forma de círculo se consideraba perfecto para una iglesia porque se pensaba que esta forma era la más noble de todas las figuras geométricas. Además, los edificios cristianos que conmemoraban a los mártires eran tradicionalmente estructuras con plantas centralizadas. Por ende, el Templeto es un excelente ejemplo de la mezcla de ideas clásicas y cristianas.
Un nuevo papa fue elegido en 1503, el papa Julio II (pontífice entre 1503 y 1513) y él resultó ser uno de los más excelsos mecenas de arte durante el Renacimiento y un hombre que se impuso la misión de mejorar el destino de Roma en todas las áreas. El papa Julio II empezó a interesarse en Bramante desde 1504 cuando el arquitecto estaba trabajando en la renovación del Palacio Vaticano y la Villa Belvedere. A través de los siglos, el área había sido construida creando algo así como una expansión caótica de edificios. La solución de Bramante fue la de crear un patio central rodeado de dos galerías techadas o loggias, donde se utilizaron columnas dóricas, jónicas y corintias. Había varias zonas verdes conectadas por rampas o escaleras ascendían del Palacio Vaticano hasta el Belvedere. Hubo un problema en las fundaciones de algunas áreas del patio, lo que retrasó la finalización del proyecto hasta después de la muerte de Bramante; además, la parte proyectada para el palacio nunca comenzó. En la actualidad, poco se puede ver de los diseños de Bramante debido a la extensiva reconstrucción realizada a través de los años.
Otro de los edificios de Roma con los que se relaciona a Bramante, aunque no con absoluta certeza, es el palacio de la Cancelleria, completado alrededor de 1511. Bramante también creó varias calles nuevas en la ciudad. La gran cantidad de construcciones nuevas de este periodo hizo necesario innovar en materiales baratos que fueran fáciles de instalar, lo que hizo que Bramante fuera un pionero en el uso del estuco.
La Basílica de San Pedro
Julio II tenía en mente un proyecto aún más prestigioso para Bramante: construir una nueva y colosal iglesia, la Basílica de San Pedro. Este proyecto que parecía nunca terminar comenzó el 18 de abril de 1506 cuando se sentó la primera piedra de la fundación. El proyecto fue uno de los más ambiciosos que jamás se hayan realizado y con el tiempo, casi todos los arquitectos renacentistas dignos de mención fueron llamados a participar. Bramante fue nombrado superintendente de los planes arquitectónicos del pontífice. Primero se despejó el área y para ello fue necesario eliminar la muy deteriorada Basílica de Constantino. De hecho, fueron tantos los edificios viejos arrasados para la remodelación del Vaticano, que el arquitecto adquirió el desafortunado apodo de «Ruinante». La contribución imperecedera de Bramante a lo que se convertiría en la Basílica de san Pedro fueron las cuatro torres gigantes y sus arcos. Resultó que se cambiaron los diseños originales de Bramante, pero se conservó la cruz central como un plano de cruz griega, tal cual Bramante la había concebido. De hecho, el plano centralizado de la iglesia se copió mucho a través de Italia.
Mientras Bramante estaba ocupado construyendo el Vaticano, Miguel Ángel (1475-1564) estaba cerca decorando la bóveda de la Capilla Sixtina (1508-1512). Después de la muerte de Bramante, el mismo Miguel Ángel fue partícipe en el proyecto de la basílica. El artista se lamentó de los cambios hechos por arquitectos posteriores a los planos originales realizados, como aparece en esta carta:
No se puede negar que Bramante fue tan valiente en arquitectura como cualquier otro que haya sido de los antiguos hasta ahora. Fue él quien hizo el primer plano de planta de San Pedro, no lleno de confusión, sino claro y sencillo, luminoso y aislado del entorno, de modo que no afectaba de forma alguna el palacio; y fue considerado como bello y manifiestamente lo sigue siendo hoy…
(Michelangelo Buonarroti. Le lettere di Michelangelo Buonarroti, Carta CDLXXIV del año 1555, p. 535)[2]
Muerte y legado
Cuando el papa Julio II murió en 1513, Bramante fue mantenido por su sucesor, el papa León X (pontífice entre 1513 y 1521), pero para entonces tenía quebrantos de salud. Es posible que el arquitecto le haya entregado al papa León X un plan para controlar mejor el sistema de agua de Roma, lo que prevendría las inundaciones regulares causadas por las crecidas del río Tíber. Bramante murió en Roma el 11 de abril de 1514. Como corresponde, sus restos mortales fueron enterrados en la Basílica de San Pedro.
Desafortunadamente, los escritos de Bramante, que para entonces cubrían muchos temas propios a la arquitectura tales como estudios de perspectiva, fortificaciones y arquitectura gótica, no sobrevivieron. Su influencia sí que ha continuado viva gracias a sus edificios, que durante siglos han sido copiados por otros arquitectos. El templete circular en Montorio es solo un ejemplo. Desde entonces, este diseño, con su elegante fachada y centro en bóveda de cañón que se alza sobre un anillo de columnas hasta su elevada cúpula, ha sido imitado por todas partes y todavía puede verse en los edificios construidos a través del mundo entero, desde la catedral de San Pablo en Londres hasta el Capitolio de los Estados Unidos.
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[1] N. de la T.: La cita ha sido traducida al español a partir del texto original en inglés y estará publicada por ‘World History Encyclopedia’ con la amable autorización de los titulares del derecho de autor, Batsford Books (correo electrónico del 16/05/2023). Fuente: © Peter Murray, 1963, The Architecture of the Italian Renaissance, una publicación de la editorial B.T. Batsford Ltd en Londres.
[2] N. de la T.: Esta carta fue traducida del texto original en italiano. Fuente: Buonarroti, Michelangelo, 1475-1564. Le lettere di Michelangelo Buonarroti; Florencia: Le Monnier (1904), página 535, https://archive.org/details/leletteredimiche00mich/page/535/mode/2up. Consultado el 17 de enero de 2023.
