Siddhartha Gautama

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Joshua J. Mark
por , traducido por Agustina Cardozo
Publicado el 23 septiembre 2020
Disponible en otros idiomas: inglés, francés
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Siddhartha Gautama, the Historical Buddha (by Cristian Violatti, CC BY-NC-SA)
Siddhartha Gautama, el Buda histórico
Cristian Violatti (CC BY-NC-SA)

Siddhartha Gautama (más conocido como Buda, c. 563 - c. 483 a.C.) fue, según la leyenda, un príncipe hindú que renunció a su posición y riqueza para buscar la iluminación como asceta espiritual, alcanzó su objetivo y, al predicar su camino a otros, fundó el budismo en la India en los siglos VI-V a.C.

Los acontecimientos de su vida son en gran parte legendarios, pero se lo considera una figura histórica real y un contemporáneo más joven de Mahavira (también conocido como Vardhamana, c. 599-527 a.C.), que estableció los principios del jainismo poco antes de la época de Siddhartha.

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Según los textos budistas, cuando Siddhartha nació se le profetizó que se convertiría en un poderoso rey o en un gran líder espiritual. Su padre, temiendo que se convirtiera en lo segundo si se exponía al sufrimiento del mundo, le protegió de ver o experimentar algo desagradable o molesto durante los primeros 29 años de su vida. Un día (o en el transcurso de unos cuantos) se escabulló de las defensas de su padre y vio lo que los budistas denominan las Cuatro señales:

  • Un anciano
  • Un enfermo
  • Un hombre muerto
  • Un asceta religioso

A través de estos signos, se dio cuenta de que él también podía enfermar, envejecería, moriría y perdería todo lo que amaba. Comprendió que la vida que llevaba le garantizaba el sufrimiento y, además, que toda la vida se definía esencialmente por el sufrimiento de la necesidad o la pérdida. Por lo tanto, siguió el ejemplo del asceta religioso, probó diferentes maestros y disciplinas, y finalmente alcanzó la iluminación por sus propios medios y llegó a ser conocido como Buda ("despierto" o "iluminado").

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Posteriormente, predicó su "camino medio" de desapego a los objetos sensoriales y renuncia a la ignorancia y la ilusión a través de sus Cuatro nobles verdades, la Rueda del devenir y el Noble camino óctuple. Tras su muerte, sus discípulos conservaron y desarrollaron sus enseñanzas hasta que el rey mauriano Ashoka el Grande (que reinó del 268 al 232 a.C.) las difundió desde la India a otros países. Desde la época de Ashoka, el budismo ha seguido floreciendo y, en la actualidad, es una de las principales religiones del mundo.

Antecedentes históricos

Siddhartha nació en una época de transformación social y religiosa en la que varios pensadores empezaron a cuestionar la autoridad de los Vedas.

Siddhartha nació en Lumbini (en el actual Nepal) durante una época de transformación social y religiosa. La religión dominante en la India en aquella época era el hinduismo (Sanatan Dharma, "orden eterno"), pero varios pensadores de la época habían empezado a cuestionar su validez y la autoridad de los Vedas (las escrituras hindúes), así como las prácticas de los sacerdotes.

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En el plano práctico, los críticos del hinduismo ortodoxo afirmaban que la religión no satisfacía las necesidades del pueblo. Se decía que los Vedas se habían recibido directamente del universo y no se podían cuestionar, pero estas escrituras estaban todas en sánscrito, un idioma que el pueblo no podía entender, y eran interpretadas por los sacerdotes para fomentar la aceptación del lugar que uno ocupa en la vida (por difícil o empobrecido que sea) mientras ellos mismos seguían viviendo bien de las donaciones de los templos.

A nivel teológico, la gente empezó a cuestionar toda la construcción del hinduismo. El hinduismo enseñaba que había un ser supremo, Brahman, que no solo había creado el universo, sino que era el universo mismo. Brahman había establecido el orden divino, mantenía este orden y había entregado los Vedas para que los seres humanos pudieran participar en este orden con comprensión y claridad.

Se entendía que el alma humana era inmortal y que el objetivo de la vida era realizar su karma (acción) de acuerdo con su dharma (deber) para liberarse del ciclo de renacimiento y muerte (samsara) y alcanzar la unión con el alma superior (atman). También se entendía que el alma se encarnaría en cuerpos físicos múltiples veces, una y otra vez, hasta que uno finalmente alcanzara esta liberación.

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Los sacerdotes hindúes de la época defendían la fe, que incluía el sistema de castas, como parte del orden divino, pero a medida que empezaban a circular nuevas ideas, cada vez más gente se cuestionaba si ese orden era divino en absoluto cuando lo único que parecía ofrecer eran interminables rondas de sufrimiento. El erudito John M. Koller comenta:

Desde el punto de vista religioso, las nuevas formas de fe y práctica desafiaron la religión védica establecida. La principal preocupación que dominaba el pensamiento y la práctica religiosa en la época de Buda era el problema del sufrimiento y la muerte. El miedo a la muerte era un problema especialmente agudo, porque la muerte se veía como una serie interminable de muertes y renacimientos. Aunque la solución de Buda al problema era única, la mayoría de los buscadores religiosos de esta época se dedicaban a la búsqueda de una forma de liberarse del sufrimiento y de la muerte repetida. (46)

En esta época surgieron muchas escuelas de pensamiento en respuesta a esta necesidad. Las que apoyaban el pensamiento hindú ortodoxo se conocían como astika ("existe"), y las que rechazaban los Vedas y la construcción hindú se conocían como nastika ("no existe"). Entre las escuelas nastika que sobrevivieron a la época y se desarrollaron están la chárvaka, el jainismo y el budismo.

Juventud y renuncia

Siddhartha Gautama creció en esta época de transición y reforma pero, según la famosa leyenda budista relativa a su juventud, no habría sido consciente de nada de ello. Cuando nació, se profetizó que se convertiría en un gran rey o en un líder espiritual y su padre, esperando lo primero, escondió a su hijo de todo lo que pudiera ser angustiante. La madre de Siddhartha murió una semana después de su nacimiento, pero él no tuvo conciencia de ello, y su padre no quería que experimentara nada más mientras crecía que pudiera inspirarlo a adoptar un camino espiritual.

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Maya Giving Birth to the Buddha
Maya dando a luz al Buda
Cristian Violatti (Copyright, fair use)

Siddhartha vivió entre los lujos del palacio, se casó, tuvo un hijo y no le faltó nada como heredero de su padre hasta su experiencia con las Cuatro señales. Tanto si vio al anciano, al enfermo, al muerto y al asceta en rápida sucesión en un solo viaje en su carruaje (o carro, según la versión), como si lo hizo a lo largo de cuatro días, la historia relata cómo, con cada uno de los tres primeros, preguntó a su cochero: "¿También me puede pasar a mí?". Su cochero le respondió que todos envejecían, todos se podían enfermar y todos morían.

Al reflexionar sobre esto, Siddhartha comprendió que todos sus seres queridos, todos los objetos finos, todas su vestimenta glamorosa, sus caballos, sus joyas, un día ya no iban a estar (en cualquier momento y en cualquier día), porque él estaba sujeto a la edad, la enfermedad y la muerte al igual que todos los demás. La idea de una pérdida tan tremenda le resultaba insoportable, pero se dio cuenta de que el asceta religioso (tan condenado como cualquiera) parecía estar en paz, por lo que le preguntó por qué parecía tan contento. El asceta le dijo que seguía el camino de la reflexión espiritual y el desapego, reconociendo que el mundo y sus trampas eran una ilusión, y que por lo tanto no se preocupaba por la pérdida, ya que lo había entregado todo.

Siddhartha sabía que su padre nunca le permitiría seguir este camino y, además, tenía una esposa y un hijo de los que era responsable que también tratarían de impedírselo. Pero al mismo tiempo, la idea de aceptar una vida que sabía que acabaría perdiendo y lo haría sufrir era insoportable. Una noche, después de contemplar todos los objetos preciosos a los que estaba apegado y a su esposa e hijo dormidos, salió del palacio, dejó sus finas ropas, se puso la túnica de un asceta y partió hacia el bosque. En algunas versiones de la historia recibe ayuda por medios sobrenaturales, y en otras, simplemente se marcha.

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Críticas al relato de las cuatro señales

Las críticas a este relato suelen incluir la objeción de que es imposible que Siddhartha haya pasado 29 años sin enfermarse, ver a una persona mayor o ser consciente de la muerte, pero los estudiosos lo explican de dos maneras:

  • el relato es un símbolo de las condiciones que causan/reproducen el sufrimiento
  • el relato es una construcción artificial para darle al budismo un pasado ilustre

Koller aborda el primer punto, señalando:

Lo más probable es que la verdad de la leyenda de las cuatro señales sea simbólica y no literal. En primer lugar, pueden simbolizar crisis existenciales en la vida de Siddhartha ocasionadas por experiencias con la enfermedad, la vejez, la muerte y la renuncia. Más importante aún, estas cuatro señales simbolizan su llegada a una profunda comprensión de la verdadera realidad de la enfermedad, la vejez, la muerte y la satisfacción, y su convicción de que la paz y la satisfacción son posibles a pesar de que todo el mundo experimenta la vejez, la enfermedad y la muerte. (49)

Siddhartha's Secret Escape, Gandhara Relief
La fuga secreta de Siddhartha, el alivio de Gandhara
Jan van der Crabben (CC BY-NC-SA)

Los eruditos Robert E. Buswell, Jr. y Donald S. López, Jr. abordan el segundo punto señalando que la historia de las Cuatro señales se escribió más de 100 años después de la muerte de Buda y que los primeros budistas estaban "motivados en parte por la necesidad de demostrar que lo que Buda enseñaba no era la innovación de un individuo, sino el redescubrimiento de una verdad intemporal" para dar al sistema de creencias la misma pretensión de orígenes antiguos y divinos que tienen el hinduismo y el jainismo (149).

La historia puede ser cierta o no, pero poco importa porque se ha llegado a aceptar como verdad. Aparece completa por primera vez en el Sutra Lalitavistara (alrededor del siglo III d.C.) y, hasta entonces, puede haber sufrido grandes modificaciones a través de la tradición oral. El significado simbólico parece obvio y la afirmación de que se escribió para mejorar el prestigio del pensamiento budista, que tenía que competir con las creencias establecidas del hinduismo y el jainismo para conseguir adeptos, también parece probable.

Vida ascética e iluminación

Siddhartha buscó primero al famoso maestro Arada Kalama, con quien estudió hasta dominar todo lo que Kamala sabía, pero el "logro de la nada" que obtuvo no lo liberó del sufrimiento. Luego se convirtió en alumno del maestro Udraka Ramaputra, quien le enseñó a suprimir sus deseos y a alcanzar un estado "ni consciente ni inconsciente", pero esto no le satisfizo ya que, además, no abordaba el problema del sufrimiento. Se sometió a las más duras disciplinas ascéticas, probablemente siguiendo un modelo jainista, y llegó a comer solo un grano de arroz al día, pero aun así, no pudo encontrar lo que buscaba.

En una versión de su historia, en ese momento tropieza con un río, apenas con fuerzas para mantener la cabeza por encima del agua, y recibe la dirección de una voz en el viento. En la versión más popular, lo encuentra en el bosque una lechera llamada Sujata, que lo confunde con un espíritu arbóreo porque está muy demacrado, y le ofrece un poco de leche de arroz. La leche lo revive y pone fin a su ascetismo, y se dirige a la cercana aldea de Bodh Gaya, donde se sienta en un lecho de hierba bajo un árbol Bodhi y jura permanecer allí hasta que comprenda el modo de vivir sin sufrimiento.

Buddha head at Wat Mahathat
Cabeza de Buda de Wat Mahathat
Alex Kovacheva (CC BY-NC-SA)

Sumido en un estado de meditación, Siddhartha contempló su vida y sus experiencias. Pensó en la naturaleza del sufrimiento y reconoció plenamente que su poder provenía del apego. Finalmente, en un momento de iluminación, comprendió que el sufrimiento era causado por la insistencia humana en estados permanentes del ser en un mundo de impermanencia. Todo lo que uno era, todo lo que creía poseer, todo lo que quería ganar, estaba en un constante estado de flujo. Se sufría porque se ignoraba el hecho de que la vida misma era cambio y se podía dejar de sufrir reconociendo que, siendo así, el apego a cualquier cosa creyendo que sería duradera era un grave error que solo lo atrapaba a uno en un ciclo interminable de ansias, esfuerzos, renacimiento y muerte. Su iluminación era completa, y Siddhartha Gautama era ahora el Buda, el iluminado.

Principios y enseñanzas

Aunque ahora podía vivir satisfecho y hacer lo que quisiera, prefirió enseñar a los demás el camino de la liberación de la ignorancia y el deseo y ayudarles a poner fin a su sufrimiento. Predicó su primer sermón en el Parque de los Ciervos de Sarnath, en el que presentó a su audiencia las Cuatro nobles verdades y el Noble camino óctuple. Las Cuatro nobles verdades son:

  • La vida es sufrimiento
  • La causa del sufrimiento es el deseo
  • El fin del sufrimiento viene con el fin del deseo
  • Hay un camino que nos aleja del deseo y del sufrimiento

La cuarta verdad dirige a uno hacia el Noble camino óctuple, que sirve de guía para vivir la vida sin el tipo de apego que garantiza el sufrimiento:

  • Visión correcta
  • Intención correcta
  • Discurso correcto
  • Acción correcta
  • Medios de vida correctos
  • Esfuerzo correcto
  • Atención correcta
  • Concentración correcta

Al reconocer las Cuatro nobles verdades y seguir los preceptos del Noble camino óctuple, uno se libera de la Rueda del devenir, que es una ilustración simbólica de la existencia. En el centro de la rueda se encuentran la ignorancia, el deseo y la aversión que la impulsan. Entre el centro y el borde de la rueda hay seis estados de existencia: humano, animal, fantasmas, demonios, deidades y seres infernales. A lo largo del borde de la rueda están representadas las condiciones que causan el sufrimiento, como el cuerpo-mente, la conciencia, el sentimiento, la sed y el aferramiento, entre muchas otras, que nos atan a la rueda y nos hacen sufrir.

se puede seguir disfrutando de todos los aspectos de la vida desde el camino budista, pero reconociendo que estas cosas no pueden durar.

Al reconocer las Cuatro nobles verdades y seguir el Noble camino óctuple, uno seguirá experimentando pérdidas, sintiendo dolor, conociendo la decepción, pero no será lo mismo que la experiencia de duhkha, traducida como "sufrimiento", que es interminable porque está alimentada por la ignorancia del alma sobre la naturaleza de la vida y de sí misma. Uno puede seguir disfrutando de todos los aspectos de la vida al seguir el camino budista, pero reconociendo que estas cosas no pueden durar, no está en su naturaleza durar, porque nada en la vida es permanente.

Los budistas comparan esta comprensión con el final de una cena. Cuando la cena termina, uno agradece a su anfitrión el rato agradable que ha pasado y se va a casa; no se tira al suelo llorando y lamentando el fin de la velada. La naturaleza de la cena es que tiene un principio y un final, no es un estado permanente, como tampoco lo es nada en la vida. En lugar de lamentar la pérdida de algo que uno nunca podría esperar haber mantenido, hay que apreciar lo que se ha vivido por lo que es, y dejarlo ir cuando se termine.

Conclusión

Buda llamó a su enseñanza el Dharma, que en este caso significa "ley cósmica" (no "deber" como en el hinduismo), ya que se basa por completo en el concepto de las consecuencias innegables de los pensamientos que forman la realidad de uno y dictan sus acciones. Como dice el texto budista Dhammapada:

Las condiciones en las cuales nos hallamos actualmente son el resultado de nuestros anteriores pensamientos. Si una persona habla o actúa motivada por un mal pensamiento, el dolor irá tras ella, como la rueda del carro tras la pezuña del buey que lo arrastra.

Las condiciones en las cuales nos hallamos actualmente son el resultado de nuestros anteriores pensamientos. Y si una persona habla o actúa motivada por un buen pensamiento, la dicha le seguirá en todo momento, como la sombra compañera sigue a un viajero. (I.1-2)

En última instancia, el individuo es responsable de su nivel de sufrimiento porque, en cualquier momento, uno puede elegir no involucrarse en los tipos de apegos y procesos de pensamiento que causan el sufrimiento. Buda continuó enseñando su mensaje durante el resto de su vida antes de morir en Kushinagar, donde, según los budistas, alcanzó el nirvana y se liberó del ciclo de renacimiento y muerte después de que un estudiante, Cunda, le sirviera una comida que, según algunos estudiosos, podría haberlo envenenado, quizás accidentalmente.

Antes de morir de disentería, pidió que sus restos s ecolocaran en una estupa en un cruce de caminos, pero sus discípulos los dividieron entre ellos y los hicieron enterrar en ocho (o diez) estupas correspondientes a lugares importantes en la vida de Buda. Cuando Ashoka el Grande abrazó el budismo, hizo desenterrar las reliquias y volver a enterrarlas en 84.000 estupas por toda la India.

Luego envió misioneros a otros países para difundir el mensaje de Buda, donde fue recibido tan bien que el budismo se hizo más popular en países como Sri Lanka, China, Tailandia y Corea que en la India (lo cual sigue siendo cierto) y el pensamiento budista se desarrolló aún más posteriormente. Hoy en día, los esfuerzos de Siddhartha Gautama son apreciados en todo el mundo por quienes han abrazado su mensaje y siguen su ejemplo de apreciar la belleza de la vida sin aferrarse.

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Sobre el traductor

Agustina Cardozo
Agustina es traductora pública (inglés/español), uruguaya, con estudios avanzados de Lingüística. Sus áreas de experiencia como traductora son la traducción biosanitaria y la traducción jurídica. Le interesan la Historia y las humanidades en general.

Sobre el autor

Joshua J. Mark
Joshua J. Mark no sólo es cofundador de World History Encyclopedia, sino también es su director de contenido. Anteriormente fue profesor en el Marist College (Nueva York), donde enseñó historia, filosofía, literatura y escritura. Ha viajado a muchos lugares y vivió en Grecia y en Alemania.

Cita este trabajo

Estilo APA

Mark, J. J. (2020, septiembre 23). Siddhartha Gautama [Siddhartha Gautama]. (A. Cardozo, Traductor). World History Encyclopedia. Recuperado de https://www.worldhistory.org/trans/es/1-11767/siddhartha-gautama/

Estilo Chicago

Mark, Joshua J.. "Siddhartha Gautama." Traducido por Agustina Cardozo. World History Encyclopedia. Última modificación septiembre 23, 2020. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-11767/siddhartha-gautama/.

Estilo MLA

Mark, Joshua J.. "Siddhartha Gautama." Traducido por Agustina Cardozo. World History Encyclopedia. World History Encyclopedia, 23 sep 2020. Web. 21 dic 2024.

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