La antigua Gran Bretaña era una masa de tierra situada al noroeste del continente europeo que fue ocupada por primera vez por humanos hace unos 800.000 años antes de convertirse en una isla alrededor del 6000 a.C. debido a las inundaciones que la separaron del continente. La agricultura comenzó a desarrollarse en la región alrededor del 4200 a.C., lo que fomentó el desarrollo de la civilización.
La evidencia más temprana de humanos en el área data de hace 800.000 y 700.000 años aproximadamente; los neandertales aparecieron hace unos 400.000 años y el Homo sapienshace 12.000 años aproximadamente. Las primeras sociedades de cazadores-recolectores se hicieron sedentarias hacia el 4.200 a.C., durante el Neolítico, pero la vida cotidiana de estos pueblos sólo se conoce a través de evidencias arqueológicas, ya que no dejaron ningún registro escrito. Migraciones como las de los pueblos de la cultura del vaso campaniforme (2500 a.C. aproximadamente) influyeron en un cambio en las normas culturales, tal y como lo evidencia la cerámica, así como también lo haría la posterior migración celta.
La región era conocida en el mundo mediterráneo a través de historias de comerciantes fenicios que viajaban allí regularmente, y la primera mención escrita de "Britania" aparece en el 325 a.C. en la obra Sobre el océano: el famoso viaje de Piteas de Massalia (actual Marsella, Francia), un explorador griego. No se sabía nada del interior de Britania hasta que los romanos la conquistaron a partir del año 43 d.C. Después de que los romanos se fueran en el año 410 d.C., llegaron otros pueblos, como los anglosajones, que influyeron aún más en la estructura social, la religión y la cultura de los britanos.
Este paradigma continuó con la llegada de los vikingos en el 793, el surgimiento de los reinos anglosajones en respuesta a los invasores y la conquista normanda de Inglaterra en 1066. Para entonces, la "antigua Gran Bretaña" ya había pasado por la etapa que los historiadores denominan Antigüedad tardía y se estaba acercando al período moderno temprano, cuyo inicio suele datarse hacia el año 1500.
EL PERÍODO NEOLÍTICO FUE TESTIGO DE LA CREACIÓN DE MONUMENTOS MEGALÍTICOS, TUMBAS Y YACIMIENTOS QUE HAN SE HAN INTERPRETADO COMO TEMPLOS.
La región que se conocería más adelante como "Gran Bretaña" corresponde a la zona sur del actual Reino Unido de Escocia, Gales y Gran Bretaña (excluida Irlanda del Norte) y estaba unida al continente europeo durante el Paleolítico cuando llegaron los primeros homínidos. El Homo erectusapareció en la región hace aproximadamente unos 600.000 años y los neandertales hace unos 400.000 años. El fuego ya había sido descubierto en la época del Homo erectus, que creó fogones para iluminar y calentar sus viviendas que se ubicaban en cuevas. Los neandertales parecen haber desarrollado herramientas rudimentarias y también utilizaban el fuego para generar calor y cocinar. La cultura neandertal incluía muchos aspectos de la civilización posterior, como el comercio local y de larga distancia, los objetos funerarios, la producción textil y el arte.
El Homo sapiens aparece en Europa hace unos 50.000 años y en Gran Bretaña hace unos 12.000 años. Las regiones conocidas posteriormente como Gran Bretaña y Albión (Escocia) se convirtieron en una isla hacia el año 6000 a.C., cuando deslizamientos de tierra en Noruega provocaron un enorme tsunami que convirtió la zona baja del sureste en lo que hoy se conoce como el canal de la Mancha. Según estudios recientes (2020), es posible que la zona sumergida (a la que los estudiosos modernos se refieren como Doggerland) se haya convertido inicialmente en varias islas antes de que el aumento del nivel del mar las hundiera también, separando a los que habían migrado a Gran Bretaña del resto de Europa.
Estas comunidades de cazadores-recolectores vivieron una existencia nómada o seminómada hasta aproximadamente el año 4200 a.C., cuando el paradigma cambió hacia la agricultura y los asentamientos permanentes durante el Período Neolítico. En esta época se crearon monumentos megalíticos, tumbas y sitios que se han interpretado como templos, Stonehenge es el más conocido, datado entre los años 3000 y 2400 a.C. La Edad del Bronce comienza en Gran Bretaña alrededor del 2500-2100 a.C., y es cuando empiezan a aparecer objetos de bronce en el registro arqueológico, aproximadamente en esta misma época, aparecen los pueblos de la cultura del vaso campaniforme.
Los pueblos del vaso campaniforme, llamados así por el tipo de cerámica que creaban, emigraron a Gran Bretaña desde Europa por mar, pero nadie sabe por qué. Parece que le daban más importancia al individuo, tal y como demuestra la ornamentación de su cerámica y el tipo de elementos utilizados como ajuar funerario que incluían las armas del difunto. Los celtas llegaron a la región alrededor del año 900 a.C. y, hacia el año 600 a.C., habían perfeccionado la arquitectura conocida como castro. Los castros sugieren una identidad tribal, o al menos comunal/regional, y conflictos entre diferentes asentamientos, muy probablemente por recursos naturales.
Contacto mediterráneo
Los fenicios de Cartago estuvieron en contacto con la población de Britania desde el año 450 a.C., aproximadamente, cuando una expedición liderada por Himilcón llegó allí para obtener estaño, un elemento necesario para fabricar bronce. Los fenicios comerciaban con los pueblos costeros y fueron los primeros en llevar noticias de Britania a los griegos, con quienes también comerciaban. En el año 325 a.C., Piteas exploró la costa de Gran Bretaña y fue el primero en nombrar la isla "Britania" (Bretannike), que significa "pintado" y hace referencia a la costumbre de la gente de pintarse (o tatuarse). El nombre que uso para designar al pueblo en su conjunto (Pritani, que se convirtió en Britanni) dio origen al nombre de britanos y posteriormente británicos.
La obra de Piteas Sobre el océano ya no existe, pero fue citada repetidamente por escritores posteriores. El académico Barry Cunliffe señala:
Los fragmentos que sobreviven del relato de Piteas son las primeras descripciones que tenemos de Britania, las islas británicas y las costas orientales del Mar del Norte y representan los inicios de la historia del noroeste de Europa y la primera visión que los británicos tienen de sus antepasados. (viii)
Estos antepasados eran las más de 20 tribus diferentes de Britania que incluían a los atrebates y los catuvellaunos, ambos desempeñarían un papel importante en el futuro de Britania, al igual que los icenos y muchos otros a través de sus interacciones y relaciones con Roma.
La Britania romana
Los romanos conocían Britania al menos desde el siglo IV a.C. a través de los comerciantes fenicios y griegos, pero no tuvieron contacto directo con sus habitantes hasta que Julio César cruzó el canal de la Mancha desde la Galia en el 55 a.C. César no tenía la maquinaria para realizar un asedio y sus barcos habían sufrido daños durante la travesía, por lo que no estaba preparado para ningún enfrentamiento importante y se retiró. Regresó en el 54 a.C. y estableció relaciones diplomáticas con algunas tribus, especialmente con los atrebates y los catuvellaunos.
al reconocer EL VALOR DE LOS PLANES ANTERIORES DE AUGUSTO Y USANDO A VERICA COMO EXCUSA, CLAUDIO ENVIÓ UNA GRAN FUERZA DE INVASIÓN CONTRA BRITANIA EN EL 43 D.C.
Roma apoyó a estas tribus en los conflictos que tenían con otras a cambio de derechos comerciales, pero el gobierno romano no tenía ningún interés real en su bienestar, sólo en mantener el equilibrio de poder necesario para posibilitar el comercio.El emperador romano Augusto (que reinó entre 27 a.C. - 14 d.C.) consideró realizar expediciones para conquistar Britania y apoderarse de sus recursos, pero nunca llevó a cabo sus planes. A principios de la década del 40 d.C., Verica, rey de los atrebates, fue derrotado por Carataco, rey de los catuvellaunos, que huyó de Britania pidiendo ayuda a Roma.Calígula (que reinó entre 37-41 d.C.) movilizó una fuerza contra los atrebates, pero no llegó a lanzarla, por lo que el emperador Claudio (que reinó 41-54 d.C.), reconociendo el valor de los planes anteriores de Augusto y usando a Verica como excusa, envió una gran fuerza de invasión contra Britania en el 43 d.C. bajo el mando del general Aulo Plaucio.
Los catuvellaunos se enfrentaron a la fuerza invasora en el sur de Britania, probablemente cerca del actual Kent, en la batalla de Medway y fueron derrotados. Las fuerzas romanas luego se dividieron en diferentes direcciones bajo distintos comandantes para someter a las otras tribus y poner a Britania bajo el control del Imperio romano. Ciudades como Camulodunum (Colchester), Eboracum (York), Lindum Colonia (Lincoln), Verulamium (St. Albans) y Londinium (Londres) se establecieron con relativa rapidez. Colchester fue la primera en recibir el estatus de coloniaromana en el año 49 d.C.
Sin embargo, el camino hacia la conquista no fue fácil, ya que Carataco unió a las tribus contra los invasores romanos en repetidas ocasiones hasta su derrota y captura en el año 51 d.C. Otras tribus continuaron la resistencia contra Roma, pero la más famosa fue la revuelta de Boudica, reina de los icenos, en 60/61 d.C. durante el reinado de Nerón (54-68 d.C.). Boudica era la esposa del rey iceno Prasutago, aliado de Roma, que dividió sus posesiones entre sus hijas y Nerón. Cuando murió, Roma se negó a honrar su voluntad, y cuando Boudica se opuso, fue azotada y sus dos hijas violadas.
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Boudica unió a los icenos y a otras tribus contra Roma, destruyendo las ciudades de Colchester, St. Albans y Londinium antes de ser derrotada por el gobernador romano Cayo Suetonio Paulino en la batalla de Watling Street en el año 61 d.C. Sin embargo, esta victoria de los romanos no puso fin a la resistencia, y el general Cneo Julio Agrícola continuó la conquista, llevando la lucha a los pictos del norte y derrotándolos en la batalla del Monte Graupius en el año 83 d.C. Agrícola fue llamado a Roma después de la batalla y ningún otro general tuvo un éxito duradero en la ampliación de la frontera norte de la Britania romana, que quedó definida en el año 122 d.C. por el muro de Adriano.
Los britanos, especialmente aquellos que deseaban beneficiarse de los puestos burocráticos en el comercio y el gobierno romanos, adoptaron la vestimenta, la cultura y la lengua romanas en ciudades como Londinium (que se convirtió en la capital administrativa) y apoyaron iniciativas romanas como calzadas, acueductos, parques y edificios públicos, templos, foros, arenas y termas.
La provincia de Britania se convirtió en un recurso vital para el Imperio romano, aunque, al ser una isla con puertos a lo largo de la costa, era vulnerable a las incursiones de los piratas sajones, así como a los barcos de los francos lanzados desde la Galia a través del canal de la Mancha. Las incursiones marítimas de los sajones y los francos y las incursiones de los pictos del norte debilitaron la determinación de Roma de mantener Britania y, tras el saqueo de Roma en 410 d.C. llevado a cabo por Alarico de los visigodos, Roma comenzó a concentrar sus recursos más cerca de casa. El emperador Valentiniano I (r. 364-375 d.C.) ya había disminuido la presencia militar romana en Britania, pero en el 410 d.C., el emperador Honorio retiró por completo el ejército romano de la isla, y les informó a los administradores britanos que ahora debían defenderse por sí mismos.
La Britania anglosajona
El vacío dejado por los romanos fue llenado por la migración de los sajones que para el año 429 ya habían establecido asentamientos permanentes en Britania. A estos pueblos se les empezó a denominar anglosajones para diferenciarlos de los que permanecieron en el continente europeo y que en realidad eran un grupo diverso de sajones, anglos y jutos. El historiador Gildas (500-570) definió su aparición en Britania como una invasión a gran escala, y Beda (672-735) y Nennio (siglo IX) continuaron esta narrativa que otros historiadores posteriores también repetirían.
Según la versión más famosa de esta historia, relatada por Gildas, los britanos pidieron ayuda militar a Roma contra las invasiones de los pictos y, cuando se les dijo que no llegaría ninguna ayuda, invitaron a los sajones (con sus aliados anglos y jutos) a acudir como mercenarios. Los guerreros anglosajones se deshicieron de los pictos y luego se volvieron contra sus anfitriones, estableciéndose como señores hasta que fueron derrotados por el campeón britano Ambrosio Aureliano en la batalla de Badon Hill alrededor del año 460. Beda y Nennio adornaron aún más este relato (Nennio añadió el detalle de un jefe de guerra llamado Arturo como héroe de Badon Hill, que luego sería desarrollado por otros como el rey Arturo de los britanos), el cual se consideró historia auténtica durante siglos.
No obstante, los estudiosos modernos han rechazado esta versión de los hechos y ahora se ha determinado que los anglosajones emigraron a Gran Bretaña pacíficamente y vivieron entre los británicos. El relato de la invasión puede haberse inspirado en las incursiones de los piratas sajones, que siguieron asediando las ciudades costeras incluso después de que los anglosajones se asentaran, muy probablemente desde una posición establecida en Kent. Desde Kent, los recién llegados se dispersaron en diferentes direcciones, uniéndose a comunidades ya establecidas y participando en el comercio: También fundaron sus propios asentamientos, que llegaron a conocerse como Essex (los sajones orientales), Anglia Oriental, Sussex (los sajones meridionales), Mercia (con Middlesex, los sajones medios, que surgió más tarde como parte de Essex) y Wessex (los sajones occidentales).
Wessex fue fundada por el lider sajón Cerdic, que llegó a Britania en el año 495 con su hijo Cynric a la cabeza de una fuerza expedicionaria y derrotó a los galeses y los britanos en batalla. Aunque actualmente se hace referencia a Cerdic como sajón, los estudios modernos sugieren que podría haber sido un conde britano que había perdido su reino, se refugió con los sajones y aprendió su lengua, y luego regresó con un considerable ejército sajón para reclamar lo que le habían arrebatado. Los estudiosos aún debaten quién fue Cerdic (algunos incluso afirman que fue la base de la figura del rey Arturo) y las obras históricas de la época, incluida la Crónica anglosajona, es de poca ayuda, ya que proporciona escasa información o narraciones basadas en leyendas. El estudioso Roger Collins señala:
Existe un abismo cronológico insalvable entre el supuesto periodo fundacional del reino ficticio de Wessex, a finales del siglo V, y el siguiente periodo en el que aparecen los que se dice que eran miembros de su casa reinante, en la segunda mitad del siglo VI. Gran parte de la información relativa a la fase inicial es de carácter claramente "folclórico" o racionalizador. (178)
Quienquiera que haya sido, la reputación de Cerdic como gran rey guerrero era tan impresionante que las genealogías posteriores de la monarquía inglesa lo reclamaban como su antepasado, y solo sus descendientes podían reclamar legítimamente la realeza de Wessex hasta y después del reinado de Alfredo el Grande (871-899), el primer rey anglosajón en unificar la región contra la amenaza de las incursiones vikingas en Britania. Su nieto, Athelstan (que reinó entre 927-939), se convirtió en el primer rey de Inglaterra, que para entonces ya estaba más o menos unida bajo un gobierno y una religión centrales. Britania se cristianizó a partir del 597, tras la llegada de San Agustín de Canterbury, que convirtió a la corte real de Kent. Las comunidades cristianas de la costa fueron las primeras en sufrir los repentinos ataques de los asaltantes vikingos.
Conclusión
Aunque el cristianismo desempeñó un papel importante en la unificación cultural del pueblo, el catalizador de la unidad política fueron las incursiones vikingas que comenzaron en el 793 y atacaron primero la abadía de Lindisfarne. En un principio, los vikingos eligieron los centros religiosos de la costa por sus riquezas y por el hecho de que eran presa fácil, ya que los clérigos estaban desarmados. Sin embargo, con el tiempo organizarían invasiones a gran escala, como la llegada del Gran ejército en el 865 bajo las órdenes de Halfdan Ragnarsson (c. 865-877) e Ivar el Deshuesado (c. 870) a Anglia Oriental. Desde este punto, marcharon sobre otras comunidades y vencieron a todos los ejércitos que les enviaron hasta que fueron derrotados por Alfredo el Grande, que reunió un ejército contra ellos, en la batalla de Eddington en el 878.
Esta victoria condujo a la división de Britania en la región del Danelaw en Mercia Oriental bajo el control de Halfdan y el reino de Anglia Oriental bajo otro líder vikingo, Guthrum, con el reino de Wessex bajo el control de Alfredo. Sin embargo, la paz era inestable y, en 1013, Gran Bretaña fue invadida por Sven Barba partida (986-1014) en represalia por la masacre de los daneses en territorio británico. Tras su muerte, su hijo Canuto el Grande (1016-1035) se convirtió en rey de Dinamarca y la unió con Britania, luego con Noruega y Suecia, lo que introdujo diversas influencias culturales en cada una de estas regiones a través del aumento del comercio.
El último rey vikingo, Harald Hardrada (1046-1066), invadió Britania en 1066 y debilitó de tal manera a los anglosajones, bajo el mando del rey Haroldo Godwinson, que en ese mismo año cuando se inició la conquista normanda de Inglaterra, la batalla de Hastings resultó en una victoria normanda definitiva. Es probable que los normandos de Guillermo el Conquistador hubieran vencido en Hastings de todos modos, pero la incursión de los vikingos bajo el mando de Hardrada prácticamente les aseguró la victoria.
La conquista normanda ejerció una enorme influencia en el desarrollo de la cultura de Gran Bretaña, marcó el rumbo para la posterior expansión de las artes, la lengua, la literatura, la religión, las tecnologías militares y civiles y la arquitectura. Los normandos, como cada uno de los pueblos que llegaron a Gran Bretaña como inmigrantes o invasores, introdujeron variadas influencias que finalmente dieron lugar a la rica y diversa cultura de Gran Bretaña en la era moderna.
¿Cuándo se llamó Britania a Gran Bretaña por primera vez?
El nombre "Britania" aparece por primera vez en la obra "Sobre el océano" del explorador griego Piteas en el año 325 a.C. y procede de la palabra griega "pintado", en referencia a la costumbre de los britanos de "pintarse" o tatuarse a sí mismos.
¿Durante cuánto tiempo fue Britania una provincia de Roma?
Britania fue una provincia de Roma entre los años 43 y 410 d.C.
¿Hubo realmente una invasión anglosajona en Britania?
No. La historia de la invasión anglosajona en Britania la documentó por primera vez por el historiador Gildas en el siglo VI d. C. Los estudios modernos han establecido que los sajones, los anglos y los jutos emigraron a Gran Bretaña pacíficamente. El mito de la invasión puede deberse a los piratas sajones que asaltaban las ciudades costeras.
¿Cuándo fue la última incursión vikinga en Britania?
La última incursión vikinga en Britania se produjo en el año 1066 bajo el mando del líder Harald Hardrada, que debilitó al ejército anglosajón y, sin saberlo, ayudó a la conquista normanda en ese mismo año.
Profesional en lenguas con estudios literarios. Profesor de castellano, escritor, traductor y entusiasta de la historia. Áreas de interés: literatura, artefactos antiguos, la historia de las religiones, la astrología, la arquitectura, la historia militar y del arte.
Joshua J. Mark no sólo es cofundador de World History Encyclopedia, sino también es su director de contenido. Anteriormente fue profesor en el Marist College (Nueva York), donde enseñó historia, filosofía, literatura y escritura. Ha viajado a muchos lugares y vivió en Grecia y en Alemania.
Mark, J. J. (2023, junio 27). Antigua Gran Bretaña [Ancient Britain].
(D. V. Caballero, Traductor). World History Encyclopedia. Recuperado de https://www.worldhistory.org/trans/es/1-137/antigua-gran-bretana/
Estilo Chicago
Mark, Joshua J.. "Antigua Gran Bretaña."
Traducido por Diego Villa Caballero. World History Encyclopedia. Última modificación junio 27, 2023.
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Mark, Joshua J.. "Antigua Gran Bretaña."
Traducido por Diego Villa Caballero. World History Encyclopedia. World History Encyclopedia, 27 jun 2023. Web. 31 ene 2025.
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Escrito por Joshua J. Mark, publicado el 27 junio 2023. El titular de los derechos de autor publicó este contenido bajo la siguiente licencia: Creative Commons Attribution-NonCommercial-ShareAlike. Por favor, ten en cuenta que el contenido vinculado con esta página puede tener términos de licencia diferentes.