Enrique I reinó como rey de Inglaterra desde 1100 hasta 1135 EC. Fue hijo de Guillermo el Conquistador (r. 1066-1087 EC), Enrique subió al trono después de que su hermano Guillermo II de Inglaterra (r. 1087-1100 EC) muriera en un accidente de caza y sin un heredero. Un tercer hermano, Roberto Curthose (v. c. 1052 - c. 1135 EC), Duque de Normandía, también pretendía el trono y los dos pelearon para unificar sus territorios como había hecho su padre. Enrique consiguió la victoria final en 1106 EC y encerró de por vida a Roberto. Más tarde, Enrique disfrutó de un reinado largo y pacífico, en el cual se crearon instituciones innovadoras como la Hacienda Pública y los jueces itinerantes que aplicaban la ley del rey en todos lados. Sin un heredero legítimo, a Enrique lo precedió su sobrino Esteban, Conde de Blois (v. c. 1096-1154 EC).
Relaciones familiares y sucesión
Su padre fue Guillermo, Duque de Normandía mejor conocido como Guillermo el Conquistador o Guillermo I de Inglaterra, Enrique nació en septiembre de 1068 en Selby, Yorkshire después de que su padre invadiera el país en 1066 EC. La madre de Enrique fue Matilda de Flandes (c. 1032-1083 EC), quien era hija del Conde de Flandes y nieta de Enrique I de Francia (r. 1031-1060 EC). Matilda fue coronada Reina de Inglaterra en la Abadía de Westminster el 11 de mayo de 1068 EC. Cuando Guillermo I murió en 1087 EC, su sucesor fue su hijo Guillermo II 'Rufus' quien reinó los siguientes 13 años. El tercer hermano, Roberto Curthose, Duque de Normandía era muy ambicioso, así que los tres hermanos se enfrascaron en un juego mortal por conseguir el dominio.
Enrique fue el hijo más joven del rey y era poco probable que estuviera cerca de la sucesión al trono, fue educado para hacer carrera en la Iglesia medieval. Este plan tenía una ventaja, ya que el joven príncipe era el único de los hermanos que había tenido una educación. Por consiguiente, el príncipe se ganó el apodo de Enrique Beauclerc ('Buen escritor').
Guillermo II murió inesperadamente el 2 de agosto de 1100 EC, en New Forest como resultado de un accidente de caza cuando un noble llamado Guillermo Tirel (en ocasiones escrito Tyrrell) disparó una funesta flecha que rebotó en el lomo de un ciervo que huía y le pegó a Guillermo II en el pecho. En el momento, el incidente fue referido como un accidente y Tirel no fue castigado por su participación en la tragedia. No obstante, es curioso que el sucesor, Enrique el hermano más joven de Guillermo II estuviera en el grupo de cacería y Roberto Curthose estuviera lejos combatiendo en la Primera Cruzada, lo que le permitió a Enrique proponerse como el nuevo rey. Obviamente, Enrique no tardó en asegurar el tesoro real y ser electo por el consejo real, todo en un lapso de 48 horas después de la muerte de su hermano. Así, en agosto 6 de 1100 EC, Enrique I de Inglaterra fue coronado en la Abadía de Westminster.
Enrique se casó dos veces. Su primera esposa fue Edith (v. 1080-1118 EC), hija de Malcolm III de Escocia (r. 1058-1093), nieta de Edmundo Ironside, quien fue rey de Inglaterra sólo por un año en 1016 EC, y sobrina de Edgar Aetheling (m. c. 1125 EC). Su excelente árbol genealógico fue más tarde mejorado al adoptar el nombre normando de Matilda, quizás, para rendirle tributo a la madre de Enrique. La pareja se casó en noviembre de 1100 EC, y Matilda fue coronada reina ese mismo año, su reinado duró hasta 1118 EC. La posición del rey de Inglaterra se fortaleció con esta alianza y así aseguraba a ciertos barones que él era el más idóneo para ser rey debido a los antecedentes reales que lo apoyaban (y no su hermano Roberto), prometiendo a los barones un trato justo por parte del rey en su Carta de Libertades (mejor descrita como un edicto, ya que no tenía destinatario y desde entonces, ignorada durante mucho tiempo por el rey). Otro punto a favor de Enrique fue haberle pedido regresar del exilio a Anselmo, Arzobispo de Canterbury ese mismo año quien había perdido el favor de Guillermo II. En consecuencia, hubo una reconciliación entre la Iglesia y la Corona después de que Guillermo II fuera acusado de pagano y de robar ingresos de las tierras que manejaba la Iglesia.
Roberto Curthose y Normandía
El primer problema que el rey enfrentó, fue con su ultra ambicioso hermano, Roberto Curthose, Duque de Normandía. Roberto tenía derecho legítimo al trono inglés ya que Guillermo II lo había nombrado como su sucesor. Es más, el Duque de Normandía ya había tratado de arrancarle el trono a su padre en 1078-9 EC, cuando obtuvo el apoyo de Felipe I de Francia (r.1059-1108 EC). Roberto desafió a su padre de nuevo durante la toma de Mantes en 1087 EC. Guillermo II tuvo los mismos problemas con el ambicioso Roberto, entonces el rey invadió Normandía en 1091 EC. Más tarde los dos hermanos se unieron para derrotar a su hermano Enrique en el Monte Saint Michel, y confiscaron sus tierras en la península del Cotentin (Cherburgo).
Roberto había peleado con aplomo en la Primera Cruzada (1095-1102 EC) pero ahora había regresado a Europa y tenía mucho interés en presionar y reclamar el trono inglés. En julio de 1101 EC invadió Inglaterra y desembarcó en Portsmouth, pero Roberto como siempre, era flexible en su política y en lugar de combatir, pactó un acuerdo por medio del cual recibió una muy buena pensión y Enrique conservó la corona. La tregua duró cinco años, ya que algunos barones rebeldes en Normandía se convirtieron en una amenaza muy clara para Enrique, entonces Enrique envió un ejército a Normandía en 1106 EC. Enrique derrotó a Roberto otra vez y para siempre en una batalla campal en Tinchebray, Normandía en septiembre de 1106 EC. Roberto permaneció en prisión por 28 años hasta morir y Enrique se convirtió además de rey de Inglaterra en Duque de Normandía. Guillermo 'Clito' (n. 1102 EC) hijo de Roberto sería un motivo de sublevación para los barones rebeldes hasta su muerte en 1128 EC.
Enrique y la Iglesia
El resto del reinado de Enrique fue pacífico, aunque que parecía más un régimen de represión que de armonía, debido a los acontecimientos que siguieron a la muerte de Enrique. Hubo muestras de descontento sobre los altos impuestos del rey, pero al menos ninguna rebelión había estallado hasta el momento. Sin embargo, la Iglesia estaba dando muestras de descontento. Era costumbre que los reyes ingleses nombraran a sus clérigos importantes y el Papado se sintió ofendido; reclamaba que laicos no podrían tener tal autoridad por encima de los siervos de Dios. Amenazándolo con excomunión, Enrique negoció y renunció a su derecho a investir a su clero, sin embargo, no renunció a reclamar ciertas tierras y sus ingresos. A pesar de estas diferencias, el rey patrocinó algunos proyectos, como la construcción de un monasterio en Reading y fundó un nuevo coro en la Catedral de Canterbury en 1130 EC.
Finanzas: Hacienda Pública (the Exchequer)
Las buenas relaciones entre el rey y la Iglesia están bien señaladas, ya que Enrique I utilizó las capacidades financieras de Roger, Obispo de Salisbury (d.1139 EC), quien se desempeñó en esa función durante 36 años, además de ejercer como virrey cuando el rey se ausentaba de Normandía. En el reinado de Enrique I se creó la Hacienda Pública (the Exchequer), esencialmente era una agencia para cobrar deudas. El organismo, que su nombre deriva del uso de una mesa con casillas blancas y negras, parecido a un tablero de ajedrez de tela donde se contaban lo que adeudaba un deudor. La primera vez que se utilizó fue en 1109 EC y era manejado por el poderoso Justiciar (Juez). La Hacienda Pública produjo varios documentos para que el rey supiera cuales eran sus activos además, para saber quién le había pagado qué y quién le debía qué, esta información se registraba en rollos que se organizaban por condados. Incluso en la actualidad el Canciller de Hacienda del gobierno del Reino Unido se le llama 'Chancellor of the Exchequer'. Más importante que el título pegajoso, fue el gran paso al crear una especie de burocracia gubernamental.
A pesar de conocer el estado financiero de su reino y pese a su esfuerzo por mantener leales a los barones potencialmente rebeldes, el rey no se detuvo en otorgar grandes extensiones de tierra real y otorgar exención de impuestos a todas las clases sociales. Esto traería consecuencias muy serias para todos sus sucesores ya que el equilibrio del poder, al menos en términos de riqueza, poco a poco pasó del rey a la aristocracia. En el reinado de Enrique, el 85% de los ingresos reales provenían de la tierra; 150 años más tarde sería sólo el 40%, los impuestos tenían que solventar el resto. Un acto final de Enrique fue otro comienzo, el establecer la idea de que todos, no importaba si vivieran en tierras reales o no y tampoco que tan lejos de la corte residieran, estaban sujetos a las leyes del rey. Jueces itinerantes recorrían el país para asegurar que todos conocieran qué ley existía, aplicarla y cuál era su castigo, (en la actualidad jueces de circuito son un indicio de estos oficiales). Fue un gran paso para la creación de un sistema de justicia real que se aplicaba en todas partes del país.
Muerte y sucesión
Después de la muerte de la reina Matilde en 1118 EC, Enrique se casó en segundas nupcias con Adela, la hija del Conde de Lovaina Godofredo I (1060-1139 EC), quien fue coronada en 1121 EC. La pareja no tuvo hijos. Enrique murió el primero de diciembre de 1135 EC en San Denis-le-Fermont en Ruan, Normandía. La leyenda dice que el rey murió por intoxicación alimentaria por comer demasiadas lampreas (un tipo de anguila). Fue sepultado en la Abadía de Reading, cuyo edificio fundó del rey.
El rey no dejó un heredero varón legítimo (a pesar de que si dejó 21 hijos ilegítimos). Sus dos hijos legítimos, Guillermo (el mayor, n. c. 1103 EC) y Ricardo murieron trágicamente ahogados en Canal de la Mancha en 1120 EC, cuando iban a bordo del fatídico Barco Blanco. Los príncipes navegaban de regreso de Francia, en un viaje en donde se había negociado un acuerdo de paz entre Enrique y el Rey Luis VI (r.1109-1137 EC) en el cual se le había otorgado Normandía formalmente a Guillermo cuando se convirtió en rey. El piloto del Barco Blanco estaba ebrio y el navío golpeó una roca y se hundió cerca de Barfleur. Todos a bordo murieron excepto un carnicero normando.
Como consecuencia del desastre del Barco Blanco, sólo la hija de Enrique, Matilde (alias Emperatriz Matilde, n. 1102 EC) le sobrevivió al rey, y fue ella a quien Enrique nombró como su legítima sucesora. La Emperatriz Matilde, por lo menos tenía algunas buenas conexiones, se había casado en 1114 EC con el Emperador del Sacro Imperio Romano Enrique V (r. 1111-1125 EC), de ahí su título, pero para ese entonces el Emperador había muerto. Matilde se volvió a casar en 1128 EC, esta vez con el Conde Godofredo de Anjou (1113-1151 EC). El Conde también era conocido por el sobrenombre 'Plantagenet' ya que el escudo de armas de la familia incluía un ramo de retama (planta genista). A pesar de su linaje, la idea de que una mujer gobernara no era del agrado de muchos barones prominentes, y decidieron ignorar los deseos del rey muerto y designaron un candidato, Esteban, Conde de Blois (n. c. 1096 EC), quien era el barón más acaudalado y sobrino de Enrique I. El Conde se convirtió en el Rey Esteban el 26 de diciembre de 1135 EC y reinaría, con una breve interrupción, hasta su muerte en 1154 EC. Su reinado estaba lejos de ser pacífico ya que inmediatamente después de la coronación de Esteban hubo una guerra civil donde la lealtad se dividía entre los partidarios de Esteban y los de la Emperatriz Matilde. Como resultado de esta guerra, las tierras en Normandía se perdieron y la línea de reyes normandos llegó a su fin. Una nueva dinastía gobernante tomó posesión del trono; los Angevis-Plantagenets con su primer rey, Enrique II de Inglaterra (r. 1154-1189 EC), hijo de la Emperatriz Matilde y el Conde Godofredo de Anjou.