Samoset (c. 1590-1653, también conocido como Somerset) fue el nativo americano abenaki que primero se acercó a los colonos ingleses de la colonia de Plymouth (más tarde conocidos como peregrinos) en señal de amistad y les presentó a los nativos Squanto (c. 1585-1622) y Massasoit (c. 1581-1661), que ayudarían a salvar y mantener la colonia. Era un sagamore (jefe) de los abenaki orientales, que estaba visitando a Massasoit o había sido capturado prisionero por él en algún momento antes de que el Mayflower desembarcara en la costa de la actual Massachusetts en noviembre de 1620. Massasoit lo eligió para establecer el primer contacto con los peregrinos en marzo de 1621, y desde entonces se le reconoce su papel decisivo en la unión de los nativos americanos de la Confederación Wampanoag y los colonos ingleses de Plymouth en un pacto que se mantendría intacto durante los 50 años siguientes.
La visita de Samoset a Plymouth y el consiguiente tratado de paz con la Confederación Wampanoag bajo el mando de Massasoit figuran en dos de los principales documentos de los primeros años de la colonización, el Mourt's Relation (Relato de Mourt), escrito por William Bradford (1590-1657) y Edward Winslow (1595-1655) y Of Plymouth Plantation (Del asentamiento de Plymouth) por Bradford, aunque Samoset también es mencionado por su contemporáneo Thomas Morton (c. 1579-1647) que proporciona el único informe de que fue prisionero de Massasoit.
Todo lo que se sabe de Samoset proviene de estas obras, excepto una mención de pasada del explorador capitán Christopher Levett (1586-1630), que se reunió con Samoset en 1624 en la actual Portland, Maine, y lo consideró un honor por el papel de Samoset en ayudar a mantener la colonia de Plymouth en 1621. Obras posteriores se basaron fielmente en ellas o se apartaron de ellas para presentar a Samoset como un "indio poco de fiar" que solo fingía amistad para obtener beneficios personales o acceso a las mujeres de los colonos. El ejemplo más notable de este tipo de obras es el melodrama de 1808 The Pilgrims or The Landing of Our Forefathers at Plymouth Rock (Los peregrinos o el desembarco de nuestros antepasados en Plymouth Rock, autor desconocido), en el que Samoset aparece como el villano que intenta raptar a la virginal colona Juliana. La obra no se basa en la realidad, y Samoset, como demuestra el informe de Levett, era muy apreciado por otros colonos ingleses y europeos tras su aparición en el Relato de Mourt, publicado en 1622.
Se supone que murió en 1653 en su región natal, el actual Maine, y se lo recuerda por su participación en la supervivencia de la colonia de Plymouth. Se lo representa con regularidad en desfiles y otros actos conmemorativos que se celebran anualmente en Estados Unidos en noviembre, en torno a la festividad de Acción de Gracias, inspirada en la primera fiesta de la cosecha de la colonia de Plymouth en otoño de 1621.
Interacción entre nativos americanos e ingleses antes de 1620
Los exploradores europeos comenzaron a visitar Norteamérica para cartografiarla poco después de que Cristóbal Colón (1451-1506) estableciera colonias para España en el Caribe en 1492. En 1524, el marino y explorador florentino Giovanni da Verrazzano (1485-1528) cartografió toda la costa oriental de Norteamérica y proporcionó el primer mapa de la región que más tarde se conocería como Nueva Inglaterra. Los ingleses llegaron tarde a la colonización y no establecieron una colonia en Jamestown, Virginia, hasta 1607.
Sin embargo, los barcos ingleses remontaron la costa para explorar las posibilidades comerciales del norte (entre las regiones reclamadas por Francia y los Países Bajos) y establecieron asentamientos temporales para pescar y cazar. Samoset contaría más tarde a los peregrinos que había aprendido inglés de estos comerciantes, que conocía a los capitanes por su nombre y que mantenía buenas relaciones con ellos, quizá como forma de establecer confianza con los recién llegados.
Sin embargo, no todos los nativos americanos de la región disfrutaban de este tipo de relación con los ingleses. Los nativos americanos que se acercaban a los barcos europeos invitados por el comercio corrían igual riesgo de ser secuestrados y vendidos como esclavos o de ser tratados honestamente. El ejemplo más famoso es el caso del sachem (jefe) nauset Epenow, secuestrado por el capitán Harlow en 1610 de su isla natal de Capawe (actual Martha's Vineyard) y exhibido como "maravilla del Nuevo Mundo" durante tres años en Londres.
Epenow aprendió inglés durante su cautiverio y dejó escapar tentadoras pistas sobre una mina de oro en su antigua isla que podría hacer rico a cualquiera que quisiera volver. En 1614 fue enviado a Norteamérica a bordo de un barco comandado por Nicholas Hobson para que guiara a la tripulación hasta la mina. Sin embargo, una vez allí, saltó por la borda, cubierto en su huida por una lluvia de flechas de los miembros de su tribu que esperaban en canoas que él ya había preparado, y el barco zarpó de vuelta a Inglaterra con la bodega vacía.
Epenow se convirtió en la principal fuente de información sobre los ingleses, advirtiendo a los demás nativos de la región que no se fiaran de ellos hasta que Squanto (que también había sido secuestrado y llevado a Europa) consiguió volver a casa en 1619. La tribu de los nauset había sufrido otros ultrajes después de la captura de Epenow, ya que varios de ellos habían sido secuestrados por Thomas Hunt en 1614.
La llegada del Mayflower y el primer encuentro
Cuando el Mayflower llegó en noviembre de 1620, las relaciones amistosas que los nativos americanos habían ofrecido 20 años antes habían sido sustituidas por la sospecha, el miedo y la hostilidad. Los ingleses no solo habían secuestrado regularmente a hombres, mujeres y niños, sino que las enfermedades europeas habían exterminado a un gran número de ellos desde el actual Maine hasta Virginia, pasando por Massachusetts.
Al principio, los peregrinos no hicieron nada por mejorar las relaciones, ya que, faltos de suministros, robaron maíz y otras provisiones a los nauset mientras exploraban la zona entre noviembre y diciembre de 1620. Los nauset respondieron atacando a una partida de desembarco a principios de diciembre, un suceso que Bradford registró como el primer encuentro, en el que nadie resultó herido en ninguno de los bandos, pero el mensaje que recibieron los peregrinos fue que no debían esperar ayuda de los nativos americanos.
Tanto Bradford como Winslow señalan que, durante el primer invierno de 1620-1621, no fue que vieron a los nativos americanos sino más bien los percibieron, "merodeando" por los bosques que rodeaban el lugar donde estaban construyendo su asentamiento. El Mayflower, con sus cañones, permaneció anclado frente a la costa, y el capitán Myles Standish (c. 1584-1656) construyó una empalizada, por lo que no se produjeron más ataques, pero tampoco hubo propuestas de amistad.
La decisión de Massasoit
Entre diciembre de 1620 y marzo de 1621, el 50% de los pasajeros y la tripulación del Mayflower murieron por enfermedad, desnutrición u otras causas. Se suponía que habían desembarcado en Virginia y no estaban preparados para el duro invierno de Nueva Inglaterra, y con tantos de ellos enfermos, la construcción del asentamiento avanzó lentamente. Mientras los recién llegados luchaban por sobrevivir, Massasoit se planteaba qué hacer con ellos. A diferencia de los barcos anteriores, que habían llegado, saqueado y abandonado el lugar, este había traído a un grupo que claramente tenía intención de quedarse. Como le contaría más tarde a Bradford, su primer impulso fue expulsarlos de la tierra, y trató de conseguirlo mediante repetidos powwows en los que sus chamanes principales pedían a los espíritus de la tierra señales y ayuda para su causa. Sin embargo, los espíritus no respondieron, lo que llevó a Massasoit a considerar que tenían otro propósito para los inmigrantes.
Massasoit era el líder de la vasta Confederación Wampanoag, una unión informal de muchas tribus diferentes, que había sido la fuerza política y militar más poderosa de la región antes de que las enfermedades europeas acabaran con muchos de ellos entre 1610 y 1618. Massasoit había perdido a tanta gente que ahora se veía obligado a pagar tributo a la tribu narragansett, más poderosa y que, al vivir más al interior, no se había visto afectada por la peste.
Es posible que Massasoit haya pensado que, dado que los espíritus no habían ofrecido ninguna ayuda para expulsar a los inmigrantes, tal vez habían sido enviados para ayudarlo a recuperar su antigua reputación y poner a la tribu narragansett y massachusetts en su lugar. Sin embargo, necesitaba un emisario y tenía dos candidatos probables, Samoset y Squanto, que hablaban inglés y tenían experiencia con europeos.
Squanto había sido acogido por Massasoit en 1620 después de regresar con el capitán Thomas Dermer en 1619. Dermer y sus hombres fueron atacados (Dermer murió más tarde a causa de sus heridas) mientras Squanto permanecía con la tribu de Massasoit, los pokanoket. Parece que Massasoit y su mano derecha y jefe guerrero Hobbamock (fallecido hacia 1643) sospechaban de él, por lo que eligieron a Samoset para acercarse primero a los colonos.
La visita de Samoset
No está claro qué hacía Samoset en el poblado de Massasoit de Sowams en marzo de 1621. Bradford y Winslow afirman que Samoset les dijo que procedía de la región de Morattiggon (la actual isla de Monhegan, frente a la costa de Maine). Thomas Morton, el abogado y escritor liberal que más tarde se convertiría en enemigo de la colonia de Plymouth e incluiría críticas mordaces a su intolerancia religiosa, hipocresía y esfuerzos colonizadores en su New English Canaan (El nuevo Canaán inglés, publicado hacia 1637) afirma que fue prisionero de Massasoit y que aceptó llevar a cabo la misión a cambio de su libertad:
[Massasoit instruyó] a este salvaje sobre cómo comportarse en el tratado de paz y, para animarlo más a aventurarse entre estos habitantes recién llegados, cosa que él mismo no se atrevía a intentar sin seguridad o rehenes, prometió a ese salvaje la libertad, que había sido detenido allí como su cautivo; oferta que aceptó y, en consecuencia, vino a los plantadores, saludándolos con una bienvenida en inglés. (Libro III. cap. 1)
Bradford y Winslow no lo mencionan, sino que se limitan a describir la primera visita. El Relato de Mourt, que es anterior a Del asentamiento de Plymouth de Bradford tanto en composición como en publicación, ofrece el relato inicial:
Mientras estábamos ocupados por aquí, fuimos interrumpidos de nuevo, pues se presentó un salvaje, lo que causó alarma. Muy audazmente vino solo y a lo largo de las casas directo al punto de reunión [donde estaban las armas y los cañones], donde lo interceptamos, no permitiéndole entrar, como sin duda lo haría, debido a su audacia. Nos saludó en inglés y nos dio la bienvenida, pues había aprendido algo de inglés entre los ingleses que venían a pescar a Monchiggon y conocía por su nombre a la mayoría de los capitanes, comandantes y capitanes que solían venir. Era un hombre que hablaba con libertad, en la medida en que podía expresar lo que pensaba, y de porte correcto. Le preguntamos muchas cosas; era el primer salvaje que encontrábamos. Dijo que no era de estas tierras, sino de Morattiggon, y que era uno de sus sagamores o señores, y que llevaba ocho meses en ellas, pues estaba a un día de navegación con mucho viento y a cinco días por tierra. (51)
Samoset llevaba un arco con dos flechas (una con cabeza [punta] y otra sin ella; símbolos de guerra o de paz), una de las cuales parece ser que dejó a los colonos. Bradford y Winslow lo describen como un hombre alto, con el pelo corto por delante y largo por detrás, desnudo excepto por una tira de cuero que le rodeaba la cintura y un fleco de piel de animal, de unos veinte centímetros de largo, que caía de la tira por delante.
Les contó todo sobre la tierra en la que se encontraban, cómo se habían asentado en el lugar de la antigua tribu patuxet, que había muerto de enfermedad, y sobre Massasoit y la Confederación Wampanoag. Los colonos le dieron comida y licor, y en un momento dado, cuando empezó a soplar un viento frío, un abrigo. Bradford y Winslow señalan cómo "pasamos toda la tarde en comunicación con él; de buena gana nos habríamos librado de él por la noche, pero no estaba dispuesto a irse esta noche" (51-52). Fue acogido en casa de Stephen Hopkins (1581-1644), que había vivido anteriormente en Jamestown y, gracias a su interacción con la tribu powhatan de Virginia, conocía un poco la lengua algonquina que hablaba Samoset.
Samoset explicó cómo los habitantes de la región habían llegado a desconfiar de los ingleses después de que el capitán Hunt los secuestrara y que por eso los nauset los habían atacado en diciembre. También por eso, explicó, habían robado recientemente las herramientas de los colonos (como un pequeño acto de venganza) y accedió a negociar su devolución.
A la mañana siguiente, enviaron a Samoset con un cuchillo, un brazalete y un anillo de regalo. Volvió al día siguiente, domingo, con cinco guerreros que venían con pieles para comerciar, pero, al ser sábado, los colonos dijeron que no podían trabajar pero que los entretendrían y les darían comida y bebida. Los cinco guerreros se marcharon entonces, pero Samoset, fingiendo que no se encontraba bien para viajar, permaneció en el asentamiento hasta el miércoles, cuando se marchó con más regalos, diciéndoles que Massasoit estaba al llegar, y al día siguiente regresó con Squanto.
El Tratado de Paz
El jueves, 22 de marzo de 1621, Samoset y Squanto explicaron cómo Massasoit estaba cerca con sus guerreros y su hermano, Quadequina, y quería hablar con ellos. Massasoit y su grupo aparecieron entonces en la colina cercana y Squanto se interpuso entre los dos grupos diciendo a los colonos que su líder debía ir a hablar con el jefe. El gobernador de la época, John Carver (1584-1621), se negó y pidió a Massasoit que fuera a verlos, y Edward Winslow se ofreció para ir como rehén mientras continuaban las negociaciones, llevando regalos de cuchillos para Massasoit y Quadequina.
Massasoit fue recibido con toda la cortesía apropiada, incluso con el sonido de una trompeta y el redoble de tambores y, después de comida y bebida fuerte, se firmó un tratado de paz entre los colonos y Massasoit para velar por los intereses de cada uno, mantener relaciones pacíficas y protegerse mutuamente contra los enemigos. Después, Massasoit volvió a su fiesta, y Quadequina y sus guerreros vinieron a ser agasajados durante el resto del día. En este punto, Samoset abandona la narración y no se vuelve a hacer referencia a él, ya que Squanto se convierte en el personaje nativo americano central.
La única referencia a Samoset se produce unos años más tarde, cuando el capitán Levett escribe sobre una reunión con sagamores nativos americanos en 1624 en el puerto de la actual Portland, Maine, para hablar de comercio. Levett escribe:
Allí permanecí cuatro noches, en cuyo tiempo, llegaron muchos nativos, entre ellos Somerset, un Sagamore, uno que ha sido encontrado muy fiel a los ingleses y ha salvado la vida de muchos de nuestra nación, algunos de morir de hambre, otros de morir matados. (Mack, 171)
La reputación de Samoset, a la que se refiere Levett, tuvo que crecer a partir del Relato de Mourt, que parece haber encontrado audiencia entre los ingleses, cuyo interés por Norteamérica y la colonización había crecido enormemente desde el éxito de la cosecha de tabaco de Jamestown. El Relato de Mourt fue llevado a Inglaterra por Robert Cushman (1577-1625) en 1621 y publicado en 1622, y aunque Levett pudo haber oído hablar de Samoset de boca en boca, lo más probable es que lo leyera en el relato de Bradford y Winslow.
Conclusión
Se desconoce lo que le ocurrió a Samoset después de concertar la reunión para el tratado de paz, así como los detalles de su posterior encuentro con Levett. Si era prisionero de Massasoit, entonces el jefe cumplió su palabra y lo liberó para que regresara a casa. Si solo estaba de visita, debió pensar que sus asuntos habían concluido y se marchó. No aparece bajo ninguna luz nueva en las obras de escritores posteriores, que se limitan a repetir lo que escribieron Bradford y Winslow, hasta el siglo XIX, cuando los relatos de la colonización temprana de Norteamérica se hicieron populares a raíz de las obras del poeta estadounidense Henry Wadsworth Longfellow (1807-1882) y del novelista James Fenimore Cooper (1789-1851), quienes fomentaron la visión del nativo americano como "noble salvaje", término aplicado tanto a Samoset como a Squanto.
El melodrama de 1808 Los peregrinos o el desembarco de nuestros antepasados en Plymouth Rock se aleja de esta imagen y presenta a Samoset como el villano. Después de que Massasoit abandona la colonia tras la firma del tratado de paz, Samoset intenta secuestrar a la joven Juliana en un acto de traición. Edward Winslow acude a rescatarla, pero resulta herido y se le cae el mosquete. Juliana, agarrando el arma, huye en busca de seguridad a unos acantilados cercanos. Samoset la persigue, pero ella lo golpea con la culata del mosquete de Winslow, que cae desde el acantilado y muere (Willison, 484).
Se desconoce la recepción que tuvo la obra, pero parece ser la única que utiliza a Samoset de este modo. Desde la publicación del Relato de Mourt, y más aún después de que se publicara Del asentamiento de Plymouth en 1856, siempre se lo ha considerado como el "indio amistoso" que reunió a los peregrinos y a los nativos americanos para forjar su tratado de paz. Desde principios del siglo XX, Samoset aparece todos los años en obras de teatro y representaciones en Estados Unidos en las semanas previas a la festividad de Acción de Gracias, aunque no hay pruebas de que estuviera presente en la colonia de Plymouth en otoño de 1621, cuando se dice que se celebró la primera Acción de Gracias.